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Dakar

Carbón en el Día de Reyes para los pilotos españoles del Dakar

Carlos Sainz perdió 1 hora y 33 minutos mientras que Nani Roma y Cristina Gutiérrez se despiden de sus opciones.

Ford Raptor de Carlos SainzEuropa Press

La 'etapa reina' del Dakar ha concluido con la victoria del árabe Yazeed Al-Rahji tras una larga lucha de casi 11 horas de conducción con su compatriota Nasser Al-Attiyah, aunque el líder provisional es el sudafricano Henk Lategan, que con su Toyota, ha conseguido un más que satisfactorio tercer puesto, aprovechándose de la disputa entre los dos favoritos para disfrutar de esta posición privilegiada en la carrera. La etapa de 48 horas también se ha llevado por delante las esperanzas de los pilotos españoles, que han ido cayendo a medida que avanzaba la etapa.

Carlos Sainz se dejó durante la jornada de ayer medio coche en el desierto, afrontando el día de hoy con un Ford Raptor al que le faltaba parte de la carrocería delantera y trasera, dejando al aire los entresijos de su vehículo al que además le faltaba el cristal delantero y se le abría una de las puertas. Carlos Sainz y Lucas Cruz comenzaban la etapa con el hándicap de tener que hacer todo el recorrido sin parabrisas, protegidos únicamente con gafas de moto y con una sola rueda de repuesto, que provocó que la pareja tuviera que extremar la precaución para evitar pinchazos.

Con todo en contra solo cabía esperar que la diferencia de tiempo con las que acabaron ayer (59 minutos) se alargaran y así fue: antes del kilómetro 933 se pararon y, por si fuera poco, también se perdieron buscando un waypoint, que causó que cruzaran la meta con más de hora y media perdida, quedándose a 1h 28 minutos del líder.

El segundo Ford en tener problemas fue el de Nani Roma, que después de sufrir un fallo en el sistema de alimentación de aceite durante la primera etapa, volvió a tener un problema mecánico grave en el kilómetro 766 que le obligó a parar, perdiendo bastante tiempo esperando a la asistencia para poder continuar, que se acumula al retraso de ayer, por lo que el catalán pasó por meta con varias horas malgastadas.

Isidre Esteve llevaba un buen ritmo y rodaba en una fantástica 25 posición, pero su Toyota también tuvo problemas mecánicos y se vio obligado a parar en el kilómetro 713. Una jornada para olvidar dentro del automovilismo español. Aunque, sin duda, la que peor suerte tuvo fue la Burgalesa Cristina Gutiérrez, que hace tan solo un día salvó a Sebastian Loeb tras sufrir problemas en la cremallera de la dirección de su Dacia. Gutiérrez y su copiloto, Pablo Moreno, tuvieron que despedirse de sus opciones llegando al kilómetro 729. Su coche dijo basta y tuvieron que ser conducidos por el camión de asistencia de vuelta a su vivac en Bisha para tratar de reparar el vehículo e intentar reengancharse, aunque han perdido la posibilidad de ser 'finisher' en esta edición.