NFL
Harris, recientemente transferido a la Universidad de Kentucky, ha protagonizado unas brutales imágenes agrediendo a unos policías en Groove City (Ohio).
Al parecer, una mujer habría llamado a las autoridades locales para que llamasen al orden al jugador. Según aseguraba la mujer, Harris estaba siendo "agresivo" y "no parecía estar ahí".
Por lo tanto, allí se personaron para detener a Harris, aunque con poca fortuna. El corpulento atleta de dos metros de altura y más de cien kilos de peso reaccionó violentamente y levantó a uno de los policías con bastante facilidad. Sin embargo, sus otros dos compañeros salieron en su ayuda para por fin inmovilizarlo.
Harris no depuso su actitud ni siquiera dentro del coche policial: golpeó en repetidas ocasiones el techo del vehículo totalmente fuera de sí. Finalmente, tuvo que ser tratado con sedantes.
Ahora el joven deportista se enfrenta a un delito grave de agresión y tres delitos menores por su conducta, resistirse a un arresto y obstruir el trabajo de la Policía.