Ajedrez
El mejor jugador del mundo de ajedrez llegó 2:30 minutos tarde a su partida de tres minutos ante Kovalev. Una situación insólita y que tuvo un final increíble.
¿Se puede ganar una partida rápida de ajedrez llegando 2 minutos y 30 segundos tarde y con tan solo medio minuto por delante? La mayoría lo tendría muy crudo, pero Magnus Carlsen es un extraterrestre en este deporte.
Y es que el genial jugador noruego llegó tarde a su partida ante Kovalev en el Mundial de Blitz de 2022. Una situación insólita y ante la que nadie daba crédito. El mejor jugador del mundo entraba en la sala a la carrera, en chándal y se sentaba frente a su oponente con tan solo 30 segundos para jugar.
Cualquier jugador lo hubiera tenido muy crudo para dar la vuelta a una situación así, pero Magnus Carlsen es un jugador único e irrepetible. El noruego, que se convirtió en Gran Maestro a los 13 años y se proclamó campeón mundial con tan solo 22 años, comenzó a mover las negras a toda velocidad.
Su rival, con más tiempo que Magnus Carlsen, no pudo aprovechar esa ventaja y acabó sucumbiendo ante el genial jugador nórdico. En honor a la verdad, hay que decir que el ruso, en un gesto de caballerosidad, pensó alguna de sus jugadas durante más tiempo del habitual para, según algunos comentaristas y expertos, compensar su ventaja en el reloj.
Tras la partida, Magnus Carlsen explicó el motivo de su retraso. "Me quedé atascado en el tráfico y fue una suerte porque la ronda se pospuso un poco. Ahora me voy a cambiar y espero estar listo para el próximo partido", aseguró Carlsen con naturalidad.