Imane Khelif
La boxeadora argelina ha publicado un vídeo en el que muestra su nueva imagen con un mensaje claro: profundo: "El vestido no hace al monje, y la apariencia no revela la esencia de una persona".
La boxeadora argelina Imane Khelif ha sorprendido con un vídeo, publicado en sus redes sociales, en el que muestra un cambio de imagen para demostrar que no necesita "ajustarse a los estándares" de belleza femenina para "demostrar su valía" como mujer.
La campeona olímpica ha compartido las imágenes en una publicación conjunta con un salón de belleza. En el vídeo, Imane Khelif aparece maquillada, con el pelo suelo y con unos pendientes largos.
Con esta publicación, la boxeadora argelina pretende transmitir el profundo mensaje de que "la apariencia no revela la esencia de una persona". Así lo ha explicado en el texto "Para conseguir su medalla, no tenía tiempo que perder en salones de belleza o de compras. Nunca sintió la necesidad de ajustarse a esos estándares para demostrar su valía".
En esta dirección, Imane explica que cambiando su aspecto "no pretendía cambiar su apariencia para encajar en los moldes en los que el mundo quiere encerrarnos", sino trasmitir su mensaje.
"Puedes ser femenina y elegante cuando quieras, pero en el ring no necesitas adornos ni tacones altos. Sólo necesita estrategia, fuerza y contundencia, que es donde reside la esencia de su carácter", admite.
Por último, lo ha ejemplificado los estándares de belleza con el sexo masculino: "Igual que un bigote no hace a un hombre -los escarabajos también los tienen-, los vestidos, las extensiones y el maquillaje no definen a una mujer".
"No en todos los estadios hay verdaderas atletas, tan apasionadas como Iman Khelif. La italiana nos ha demostrado que incluso los llorones de patio de colegio, los que se inventan mentiras para robarle la comida a otro, pueden encontrarse en el ring".
La Fiscalía de París ha abierto una investigación a raíz denuncia presentada por la boxeadora argelina tras ciberacoso recibido durante los Juegos Olímpicos 2024.
La Oficina Central de Lucha contra los Crímenes contra la Humanidad y Delitos de Odio (OCLCH) de la Gendarmería francesa busca determinar si el odio recibido por la afectada se corresponde con los delitos de cíberacoso motivado por el género, insultos públicos también en razón del género, provocación pública a la discriminación e injurias públicas por su origen.
En esta dirección, el abogado de Imane Khelif, Nabil Boudi, ha expuesto que el objetivo de la denuncia que ha presentado es concretar quién inició la "campaña misógina, racista y sexista" contra su clienta, además de "quiénes alimentaron este linchamiento digital". Para él "el acoso injusto sufrido por la campeona de boxeo seguirá siendo la mayor mancha de estos Juegos Olímpicos".
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