Juegos Olímpicos de Tokio 2020
Durant y Booker lideraron la remontada de Estados Unidos en los Juegos Olímpicos, que llegó a ir 15 puntos abajo. Con esta victoria, el Team USA de baloncesto llega a su cuarta final olímpica consecutiva.
Lo tuvo en sus manos Australia. Una gran primera parte de la selección de Brian Goorjian daba la sorpresa ante Estados Unidos en el Saitama Super Arena. El combinado de Gregg Popovich volvió apracticar un baloncesto excesivamente confiado y relajado, y es que acostumbra el Team USA a ir por detrás en el marcador en estos Juegos Olímpicos de Tokio 2020, pero siempre tiende a aumentar la intensidad tras el descanso.
Ante Australia se volvió a ver la misma situación de todos los Juegos Olímpicos. Cada vez que va abajo, se ve la peor USA sobre la cancha. Tarda en carburar en la pista, pero una vez coge velocidad de crucero no hay quien la pare.
Una brillante remontada en la segunda parte de Estados Unidos, que comenzó al borde del descanso y se consumó en el tercer cuarto, mete a la selección estadounidense en su cuarta final olímpica consecutiva, en las tres anteriores se llevaron el oro en todas y cada una de ellas (Pekín 2008, Londres2012 y Río 2016).
El buen arranque de Australia
Con el objetivo de llegar a una final olímpica de baloncesto de los JJOO 2021, Australia fue muy superior durante casi toda la primera parte. Al borde del descanso llegó a ir 15 puntos arriba (26-41), pero un arreón final de Estados Unidos redujo la diferencia a tan sólo a tres puntos (42-45).
La victoria momentánea de Australia en esos momentos era gracias a un baloncesto coral, todos los jugadores sumaban, sobre todo en defensa, donde su intensidad secó al Team USA. La estrella australiana Patty Mills (15-5-8), recién traspasado a los Brooklyn Nets, no estuvo del todo acertado en el tiro, pero su gestión del juego fue vital para los australianos. Confirmó una vez más que la versión Mills en FIBA es infinitamente mejor a la versión Mills en la NBA.
Kevin Durant y Devin Booker, al rescate
En una selección plagada de estrellas de la NBA como es de la Estados Unidos, los verdaderos cracks aparecen cuando el equipo más lo necesita. Así lo hicieron el alero de los Nets, KevinDurant (23-9-2), y el escolta de los Phoenix Suns, Devin Booker (20-3-1). Entre ambos lideraron al equipo en el parcial clave en el tercer cuarto que rompería el partido de los JJOO de Tokio.
En los diez minutos posteriores al descaso, el resultado parcial fue de 32-10, 22 puntos de ventaja que colocaron a Estados Unidos 19 arriba con un sólo cuarto por jugar (74-55).
El último cuarto fue un mero trámite para la selección de Estados Unidos, ante una Australia completamente superada tras la remontada sufrida, 97-78 al final. Físicamente mermados y anímicamente hundidos, los australianos se quedan sin la final de los Juegos Olímpicos de Tokio 2020 y lucharán por el bronce ante Eslovenia o Francia. A pesar de este resultado, la participación de Australia ha sido más que notable y la vuelve a mostrar como una de las grandes selecciones del momento.
Estados Unidos llega a su cuarta final consecutiva en baloncesto, en la que buscará hacerse con un nuevo oro, como ya hizo en Pekín 2008, Londres, 2012 y Río 2016.