Juegos Olímpicos
Tenistas como Daniil Medvedev y Diego Schwartzman han criticado las altas temperaturas con las que tienen que luchar durante los partidos. La española Paula Badosa ha sufrido un golpe de calor, viéndose obligada a abandonar su partido en silla de ruedas.
Un invitado inesperado se ha colado en los Juegos Olímpicos de Tokio 2020 y no es otro que el intenso calor. Las altas temperaturas dificultan al desarrollo normal de las competiciones y son varios ya los deportistas que lo han criticado.
Daniil Medvedev y Diego Schwartzman son algunos de los tenistas que se han quejado de estas temperaturas extremas en las pistas de Tokio 2020. "Si me muero, tú serás el responsable", le dijo el ruso Medvedev al juez de silla durante su último partido.
El argentino Schwartzman también critica duramente a la organización: "Es difícil jugar así. No sé cuántos grados hará, pero la sensación es de 40. Es una locura que nos manden a jugar a las 12 del mediodía con más de 40 grados de calor. Que tres personas que están bajo un aire acondicionado decidan que tenemos que jugar así es una locura. Fue un partido para ver quién aguantaba más y él con sus saques sacó la ventaja. Parecía 'The Walking Dead".
Badosa sufre un golpe de calor
La tenista Paula Badosa también sabe cómo afecta este calor intenso en Tokio. La española sufrió un golpe de calor y se vio obligada a abandonar su partido ante Vondrousova en silla de ruedas después de caer en la primera manga.
"Estoy hecho polvo y me cuesta hasta pensar", reconoció Pablo Carreño después de superar a Dominik Koepfer. La Federación ha empleado la política del calor extremo, por la que los tenistras tienen hasta 10 minutos entre la segunda y la tercera manga.