Juegos Olímpicos
Abre la mano para que puedan participar en las clasificaciones para los Juegos de 2024, aunque aún deja en el aire que puedan hacerlo en la cita olímpica de París.
El Comité Olímpico Internacional (COI) ha levantado el veto a los deportistas rusos y bielorrusos, sancionados desde la invasión rusa de Ucrania. Recomienda a las federaciones que autoricen su participación en competiciones internacionales como "deportistas neutrales individuales", además de permitir que compitan en el proceso de clasificación para los Juegos Olímpicos de París 2024 y los Juegos de Invierno Milán-Cortina 2026, si bien sin garantizar todavía su presencia en esas citas.
Eso sí, la Junta Ejecutiva del COI asegura que la participación de deportistas con pasaporte ruso o bielorruso en los Juegos Olímpicos de París 2024 y en los Juegos Olímpicos de Invierno Milán-Cortina 2026 "no fue considerada ni en las consultas ni en sus deliberaciones de hoy". "El COI se reserva expresamente el derecho de decidir sobre su participación en el momento adecuado, aunque se considerara que se han clasificado de acuerdo con los criterios de clasificación establecidos por sus respectivas federaciones internacionales", sigue en su comunicado.
Además, reiteró que los Juegos Olímpicos "no pueden prevenir guerras y conflictos" ni "abordar todos los desafíos políticos y sociales". "Los Juegos Olímpicos pueden servir de ejemplo para un mundo en el que todos respeten las mismas reglas y se respeten unos a otros. Pueden inspirarnos a resolver problemas construyendo puentes, lo que lleva a una mejor comprensión entre las personas. Pueden abrir la puerta al diálogo y la construcción de la paz de una manera que no lo hacen la exclusión y la división", apunta el comunicado.
Con todo, el organismo ha querido también reiterar en su condena "a la invasión rusa de Ucrania", que es "una flagrante violación de la tregua olímpica", por lo que mantiene sus sanciones a los gobiernos de Rusia y Bielorrusia, entre las que se incluyen no organizar eventos deportivos internacionales en cualquiera de los dos países; no exhibir ninguna bandera, himno u otro símbolo nacional en ninguna competición internacional; y no invitar a ningún político o mandatario de los dos países a ningún evento deportivo internacional.
A discreción de las federaciones
En cuanto los deportistas rusos o bielorrusos, el COI deja la decisión de readmitirlos "a discreción de las federaciones", recomendando que vuelvan a la competición participando "como deportistas neutrales individuales", nunca en equipo. Además, aseguró que los deportistas que apoyen "activamente la guerra" no podrán competir, como tampoco los que estén contratados por las fuerzas armadas rusas o bielorrusas o las agencias de seguridad nacional.
En este sentido, recalcó a las federaciones que consideren la participación de estos "en función de sus méritos deportivos y no por motivos políticos o por sus pasaportes", recordando que a día de hoy hay otros 70 conflictos armados y guerras en el mundo y que "nadie está solicitando la exclusión" de los deportistas de esos países por ello.
Para acabar, el COI ha querido reiterar su apoyo a los deportistas ucranianos, para los que ha dotado un Fondo de Solidaridad de hasta 7,5 millones de dólares -casi 7 millones de euros-.