Pelotazo
Un jugador de béisbol recibió un aparatoso bolazo cuando se disponía a batear. Afortunadamente impactó contra el casco y se encuentra en perfecto estado.
El béisbol es un deporte más peligroso de lo que parece, y eso lo ha experimentado en sus porpias carnes el jugador y bateador Austin Hedges.
Cuando se disponía a batear en un partido de la MLB, Austin Hedges recibió un peligroso y fuerte bolazo en el caso. El lanzador no estuvo muy acertado y se le desvió la trayectoria de la bola, terminando de impactar en el caso de Hedges.
Una vez recibió el impacto cayó fulminado al suelo y todo hacía presagiar que había sufrido un fuerte golpe y podría tener consecuencias negativas. Sin embargo, la bola dio de lleno en el casco y Hedges no sufrió ningun tipo de daño.
Puede decir perfectamente que el casco le salvó la vida, ya que hay lanzamientos que pueden llegar a superar los 150 kilómetros por hora, y a esa velocidad un impacto en la cabeza o en la cara puede conllevar perfectamente la muerte. En este caso, Austin Hedges tuvo suerte.
Un deporte peligroso
Hace dos años ocurrió algo parecido pero esta vez fue el lanzador quien recibió el bolazo, el pitcher de los Atlanta Braves salió ileso tras el tremendo bolazo que se llevó en pleno partido. La bola impactó en su cabeza a 163 kilómetros por hora, pero aún así pudo incluso abandonar el campo por su propio pie.
Peor suerte corrió una niña de dos años hace poco más de un año, cuando sufrió daños irreparables tras recibir un bolazo en el partido de béisbol que enfrentaba Houston Astros y los Chicago Cubs. La joven sufrió una fractura de cráneo, convulsiones, daños en el sistema nerviosos y tendrá que tomar medicación de por vida.