Mundial de balonmano femenino
España rozó la gloria. Las 'Guerreras' lo tuvieron en la mano, pero una polémica acción a cinco segundos del final terminó con la victoria holandesa ante una selección se vació en la cancha.
Las 'Guerreras' comenzaron superando a las holandesas en el inicio de partido. Las de Carlos Viver lograron ponerse cuatro tantos por encima en el marcador, pero Holanda pudo ir recortando diferencias hasta ponerse por delante.
El partido no podía estar más igualado. Las 'Guerreras' se iban a ir al descanso por debajo en el marcador, pero con la final muy abierta.
Tras la reanudación, las españolas consiquieron reducir la diferencia en el marcador, que llegó a ser de cinco tantos, para plantarse a un solo gol a cinco minutos del final. El partido se iba a decidir por un detalle. Un detalle que desató la polémica mundial.
Final de infarto
El marcador estaba empatado a cinco segundos del final cuando Ainhoa se interpuso en la trayectoria de la guardameta holandesa, sin impedir su saque. Las árbitras señalaron los siete metros y expulsaron a Ainhoa, acción que desequilibró definitivamente el partido a pocos segundos del final.
Holanda transformaba desde los siete metros y se llevaba el oro mundial. Medalla de plata para unas Guerreras que completaron un magnífico mundial y rozaron la gloria hasta el último segundo en una final de infarto.