EL TÉCNICO SE MUESTRA OPTIMISTA
El entrenador del Real Madrid, Zinédine Zidane, ha aclarado que todavía tiene "flor" a pesar de la mala racha de resultados tras perder la pasada jornada por 0-1 contra el Betis y empatar dos partidos, y espera que sus jugadores conviertan todas las ocasiones que tengan este sábado ante el Deportivo Alavés para evitar que se hable de "gafe" de cara a portería.
"Tengo flor todavía, estoy contento y disfruto a tope de estar aquí. No pienso en el gafe ni en el mal momento, es parte del fútbol. Lo bueno es que tenemos un partido ya, el martes otro en Champions y el fin de semana que viene igual, podemos cambiarlo y lo vamos a hacer", dijo Zidane en rueda de prensa.
Tienen ocasiones de gol
En cuanto a hablar de mala racha, el técnico francés añadió que sería así si no tuvieran oportunidades de gol. "Nosotros lo analizamos pero lo más importante es tener ocasiones. Me hubiera preocupado no tenerlas porque con los jugadores que tenemos si no te preocupas al no tenerlas, sería un problema pero hace tres días jugamos en San Sebastián y metimos tres goles", explicó.
La pérdida del encuentro frente al Betis les ha puesto a una diferencia de siete puntos del FC Barcelona, principal rival, hecho que no preocupada demasiado al entrenador blanco, ya que puede haber "hasta 15 puntos de retraso y todos los equipos van a tener algún mal momento que los equipos de arriba intentarán aprovechar", además de asegurar que tras las numerosas oportunidades ante el equipo andaluz no se va a "volver loco" por perder un partido.
"No me preocupa y no hay más remedio que remontar si queremos ganar la liga. Cuando llegué había muchos puntos de retraso y en el fútbol puede pasar de todo, esto es largo y queda mucho", explicó al hacer referencia sobre la diferencia de puntos. Asimismo, aseguró que su forma de ser no va a cambiar y que no va "a gritar por gritar".
"Mi carácter es así, como siempre, desde la tranquilidad. Tengo confianza en los jugadores y tengo la suerte de poder entrenarlos. Tenemos un partido mañana para demostrarlo y yo para demostrar que valgo para estar aquí. Yo estoy tranquilo y los jugadores también. Si mañana tenemos ocasiones las vamos a meter", afirmó el exjugador madridista.
A las ausencias se suma Kroos
Para el partido en Vitoria, el Real Madrid llega con una plantilla mermada por las bajas. A las de Benzema o Theo Hernández se le añadió Marcelo en el último partido, así como la de última hora de Kroos.
"Con las bajas siempre mal. Puede pasar y es el momento para aguantar", afirmó. Aún así espera que para este partido se pueda ver al mejor Gareth Bale porque "está bien" aunque tenga que hacer rotaciones, hecho por el que está siendo criticado tras los cambios realizados en el anterior partido.
"Mi trabajo lo voy a hacer de la misma manera, creo mucho en lo que hago, lo que hago lo hago con conciencia y pensamiento y somos muchos los que lo hacemos. Las rotaciones no van a cambiar, un jugador de 20 años que haga 70 partidos no existe. Nuestros jugadores no descansan nunca, empieza la temporada y hasta el final no paran, sólo tienen unos días en Navidad y necesitamos el sistema de rotación", puntualizó.
Por otro lado, Zidane no quiso entrar en la polémica arbitral de la que tanto se está hablando por posibles preferencias a los 'culés' y afirmó que "nunca" ha hablado de ellos. "Intentan hacer su trabajo y nosotros no tenemos excusa", expresó. Por último, en el Alavés está jugando Enzo, su hijo, del que aseguró que es "muy competitivo" y que está "muy contento".
"No es que vaya a jugar contra mi hijo, tendré más emociones pero para mí el partido es Alavés contra Real Madrid y eso es lo más importante, no hay más que hablar vamos a hacerlo lo mejor posible para ganar", explicó. En este sentido, aseguró que está atento a la "evolución" que tiene Enzo, pero que ahora tienen una "relación padre-hijo sin hablar de fútbol".