ACABÓ MUY ENFADADO
Xavi Hernández dejó hace poco de jugar al fútbol pero no ha perdido su pasión y la intensidad en su nuevo puesto de entrenador.
El excentrocampista español entrena al Al Sadd y en su debut como técnico terminó enfadado con el árbitro por no pitarle un penalti a favor de su equipo. Xavi se enojó tanto que acabó perdiendo un zapato en su enérgica protesta. Genio y figura también en los banquillos.