TUVO QUE DEJARLO POR LA DIFICULTAD DE CONCILIAR SU PROFESIÓN Y SU MATERNIDAD
Jennifer Volpe es, hasta el momento, la única madre que ha logrado jugar en la primera división femenina. Tras sufrir una lesión, decidió quedarse embarazada, pero después de un año tratando de conciliar fútbol, trabajo y maternidad tuvo que dejarlo.
"Me vine abajo, echaba de menos a mi hija. Es imposible dar el 100% porque hay una persona en casa esperándote", explica Jennfier.
Esta tinerfeña jugó en la Primera División de fútbol de la Liga Femenina tras ascender con el Tacuense. Ahora concilia el cuidado de su hija con su otra pasión deportiva, el boxeo.
Te puede interesar:
Las protagonistas del Atlético-Barcelona, emocionadas: "Era un orgullo ver tanto niños y niña"