LAS CONSECUENCIAS
Los implicados en la operación Oikos podrían ir a prisión por hasta tres delitos: cuatro años por amaño de partidos (corrupción entre particulares), hasta seis años por participación dentro de organización delictiva y por actividades tendentes al blanqueo de capitales corresponderían también hasta seis años de prisión. "Un montante que podría superar los diez años", dice Beatriz de Vicente, abogada penalista.
Pero a corto plazo, los detenidos podrían verse en prisión provisional con restricciones a la libertad: "Entregar el pasaporte, presentación en los juzgados...", cuenta Alberto Palomar, socio de Broseta y experto de iusport.com.
Podrían descender los clubes
¿Qué pasará en el aspecto deportivo? La RFEF prevé inhabilitaciones de dos a cinco años a los implicados y los clubes podrían descender si se demuestra su implicación: "Mientras se investiga lo penal, el efecto deportivo va a tardar en verse", dice Palomar.
Mientras, la Liga en un comunicado y la Federación han mostrado su repulsa: "Todos estamos alineados contra la corrupción, se encuentra esta donde se encuentre", asegura Ana Muñoz, vicepresidenta de la RFEF para la integridad.
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