Fútbol
El defensa del Sevilla analiza su expulsión ante la Real Sociedad y critica la actitud del colegiado Ortiz Arias.
Sergio Ramos, uno de los capitanes del Sevilla, ha alzado la voz en la previa del partido de Champions ante el PSV Eindhoven y ha indicado que "es vital conseguir la victoria" para tener opciones de clasificarse para los octavos de final.
"Hay que dar a la gente esa alegría que desde hace tiempo no se le ha dado", destacó el defensa de Camas, quien advirtió de que "el PSV es un gran rival" y "no es casualidad que haya ganado todos los partidos de su liga" en la temporada en curso.
Sergio Ramos pidió no centrarse demasiado en la figura de su delantero centro, el exsevillista Luuk de Jong, ya que "hay que saber jugar contra el equipo, no saber jugar contra De Jong", aunque dijo que es "un jugador que va bien por alto" y "uno de los referentes" del conjunto de Eindhoven.
"Es una final, es más que un partido de 'Champions' porque no tenemos margen de error. Esos pequeños detalles en esta competición sí marcan la diferencia. Ojalá seamos mañana todos uno, que el estadio sea un infierno y que el PSV sepa que no gana aquí cualquiera", explicó Ramos.
En otro orden de cosas, el jugador andaluz fue preguntado por su expulsión en San Sebastián y aseguró que Ortiz Arias, el colegiado del partido, a veces es demasiado prepotente hablando con los jugadores, algo por lo que ya habían señalado al trencilla hace unas semanas.
"Los árbitros también se pueden equivocar, como nosotros. Antiguamente se les metía en la nevera cuando tomaban decisiones erróneas. Nosotros estamos para ayudarnos. El árbitro del otro día es una persona distante que habla con una prepotencia fuera de lugar siendo árbitro, y eso no nos gusta. Los colegiados deben dar ejemplo. Más de un jugador el otro día lo comentábamos, que te encuentras palabras fuera de lugar. Aunque tengas esa posición, todos debemos mantener el máximo respeto. Nos podemos equivocar, pero por encima de todo que haya respeto", indicó Sergio Ramos.
Respecto a la acción que le costó la cartulina roja, Ramos considera que toca corta el balón y luego toca a Brais, por lo que considera excesiva su expulsión.
"Puede haber muchas opiniones. Es una jugada en una zona de peligro, los defensas estamos siempre en ese espacio. Te la tienes que jugar. Corto el balón y luego toco a Brais. Para mí es excesiva la roja directa, creo que tenía que ser amarilla. Normal que recurra el club. Hay un timing que debe que entender el árbitro pero se debe equivocar como nosotros. No sé si me la quitarán pero que sea sólo un partido y estar pronto con el equipo", opinó Sergio Ramos.
Por último, el defensa de Camas defendió a Diego Alonso, muy cuestionado tras los últimos resultados del Sevilla.
"El fútbol tiene esas cosas. Hay veces que juegas muy bien y pierdes, nunca tienes una respuesta cierta. A veces los pequeños detalles marcan la diferencia. Debemos seguir mejorando y seguir aprendiendo. Desde la llegada del míster hemos estado todos entrenando bien, intentando absorber todo lo que nos transmite para plasmarlo en el campo. El equipo ha hecho muchas cosas bien, más allá de los resultados. Pero no estamos en un momento de mirar hacia atrás, debemos seguir luchando para conseguir los resultados, apuntó Ramos.
"Lo que debe sentir nuestro entrenador es que el equipo está a muerte con él. Las decisiones que se toman desde arriba no pasan ni por él ni por los jugadores. Ojalá esté mucho tiempo con nosotros. Confiamos en él, transmite cosas muy positivas y tiene criterios de juego que nos benefician como equipo. Desde fuera solo se perciben los resultados", concluyó el jugador sevillista.