El Clásico
Vinicius cambió la historia cuando ya pocos creían en él. El brasileño, incansable ante las críticas y las mofas, acabó decidiendo el Clásico ante el Barcelona con un gol que puede ser clave en la lucha por el título de Liga. Su gol rompió un choque en el que el Barcelona fue de más a menos hasta acabar engullido por la voracidad del Real Madrid.
El ya nuevo líder de la Liga no cejó en sus continuas cargas contra la portería de Ter Stegen, fenomenal el alemán durante toda la noche. Pero cuando ya nadie lo esperaba rompió Vinicius en el desmarque y ante un Piqué imperial durante todo el duelo definió junto al primer palo de Ter Stegen.
Ese gol fue el premio al mejor juego del Real Madrid y consecuencia de la inexplicable desconexión del equipo de Setién en la segunda parte. Messi es un fiel reflejo de lo que es ahoramismo el Barcelona, un equipo sin alma y que sufre de forma tremenda cuando no tiene el balón.
El Real Madrid tiene virtudes como la presión, la solidaridad... Pero también un lastre tremendo: la falta de gol. A punto estuvo de costarle de nuevo muy caro esta carencia.
Pero así como ante el City todo salió cruz en la recta final, ante el Barcelona fue justo lo contrario. Los cambios de Zidane funcionaron y hasta Mariano logró anotar a los 40 segundo se pisar el campo. El delirio total.
El Real Madrid se recuperó, obligado tras la dura derrota en Champions, mientras que el Barcelona se dejó el liderato. Queda mucha Liga, pero el Barcelona no aprovechó la ocasión de matar al Real Madrid.