EL CENTRAL, EN EL CENTRO DE LA POLÉMICA
Gerard Piqué compareció ante los medios en la zona mixta de Cornellá después de ser el gran protagonista del derbi ante el Espanyol con su gol en el 82 y su polémico gesto mandando callar a la grada.
"Mandar callar era lo mínimo que podía hacer. Los jugadores tenemos responsabilidad, pero también somos personas y reaccionamos según lo que pasa. Y hay un límite. Y si los que mandan no toman decisiones y no dicen nada, no nos quedaremos callados. Mando callar en general a todo el campo, y tal vez no debería, pero si el club o los propietarios no denuncian ciertas cosas...", explicó Pique.
"Son de Cornellá y con eso me refería a que cada vez están mas desarraigados de Barcelona. Tienen un propietario chino también y muchos de sus consejeros son chinos. Sé que dolió y utilicé el sarcasmo para incordiar. Las cosas han funcionado, ya que se han gastado una pasta pagando publicidad en los diarios. Falta de respeto es que me denuncien por decir que son de Cornellà y no denuncien a su afición por insultar a mi familia", incidió Piqué al ser preguntado por su ya polémico "Espanyol de Cornellá.