Mundial Qatar 2022
El próximo domingo arranca el Mundial de Qatar 2022, una Copa del Mundo de Fútbol atípica por las fechas en las que se juega y por la falta de democracia y derechos del régimen qatarí.
El Mundial de Fútbol de Qatar arrancará este domingo con un Qatar - Ecuador. A partir de ahí, el fútbol no parará en un país sobre el que aún se ciernen muchas sombras y dudas por su falta de democracia, la vulneración de derechos de las mujeres y personas LGTBI, e incluso las miles de muertes en la construcciones de sus estadios denunciadas por una investigación del diario The Guardian.
A la FIFA poco le importan las críticas de entrenadores como Jürgen Klopp o Jorge Sampaoli. El máximo organismo del fútbol ha incluso alterado el calendario de la temporada para dar cabida a un Mundial en pleno mes de noviembre. Y es que las altas temperaturas del verano hacían inviable celebrar la Copa del Mundo en las fechas habituales.
¿6.500 muertes en la construcción de los estadios?
Una investigación del diario The Guardian señalaba en febrero de 2021 que cerca de 6.5000 trabajadores, procedentes de Nepal, Sri Lanka, India, Pakistán y Bangladesh, habrían muerto en la construcciones de los estadios del Mundial de Qatar. El régimen qatarí solo reconoce 32 de esas muertes.
Ángel Gonzalo, portavoz de Amnistía Internacional España, denuncia en Antena 3 Noticias las condiciones laborales de los trabajadores que han levantado los ocho estadios del Mundial de Qatar.
"En condiciones de semi esclavitud y personas que han trabajado 16 ó 20 horas diarias a temperaturas de 50 grados centígrados. Y esto ha provocado que muchos de ellos hayan perdido la vida", explica Ángel Gonzalo.
Falta de derechos y persecución al colectivo LGTBI
No es la única polémica que envuelve al Mundial de Qatar. A esto se suma, además, la vulneración de derechos que sufren las mujeres y las personas LGTBI en el país del Golfo Pérsico. El embajador de Qatar en la Copa del Mundo y exfutbolista Khalid Salman calificó la semana pasada la o la homosexualidad como un "daño mental".
Su declaración es solo un ejemplo de la realidad que Qatar trata de maquillar con la celebración del Mundial de Qatar. Y es que el régimen qatarí ha encontrado en los eventos deportivos una vía para blanquear su falta de libertades y derechos.
Las bebidas alcohólicas, las muestras de afecto en público y las relaciones homosexuales están probidades en territorio qatarí. En su intento de transmitir normalidad, la organización del Mundial incluso ha distribuido imágenes de supuestos aficionados de Argentina, Francia, Brasil o España.
Pero la realidad es que los aficionados no acaban de aterrizar en Qatar, en un Mundial de Fútbol en el que se esperan pocos visitantes occidentales.