"LA CHAMPIONS ES UN RETO ILUSIONANTE"
El entrenador del Villarreal, Marcelino García Toral, tiene claro que le "encantaría" ser el seleccionador nacional algún día, aunque pudiese echar de menos "el día a día del trabajo" en un club como el castellonense, del que destaca su "gestión ejemplar" que le está llevando este año a pelear por la 'Champions', "una justa recompensa" tras pasar "una época muy complicada" con el descenso.
"Me encantaría ser seleccionador algún día, es lo máximo a lo que puede aspirar cualquier entrenador español. Sería un gran orgullo, pero a corto plazo podría echar de menos el día a día del trabajo en un club. Me apasiona tener retos cada semana. Disfruto mucho de mi profesión", confiesa Marcelino en una entrevista a la revista de Sportium.
Pero ahora disfruta en el Villarreal, donde es clave "la dirección del club" y "el rigor, la seriedad y el respeto de los dirigentes" para llevarle "a una situación modélica". "El club ha puesto a nuestra disposición todo lo posible a nivel estructural y humano. Las ideas son siempre transparentes y no hay disparidad de criterios. Hay un ambiente extraordinario por una gestión ejemplar", alaba.
Ahora, situados en la cuarta plaza con una buena ventaja sobre el quinto (Sevilla), reconoce que "la 'Champions' es un reto ilusionante" y que conseguir ese billete "sería maravilloso". "Para estar tan arriba, hay que hacer las cosas muy bien y este equipo lo está haciendo. Los buenos resultados llegan por el compromiso, la unión y el nivel altísimo de la plantilla. Estar tan cerca de los tres grandes es un orgullo, pero somos muy competitivos y el equipo merece un aplauso porque estamos jugando a gran altura", subraya.
"Estamos por encima de lo esperado. Los límites vienen marcados por la disponibilidad económica y es muy difícil competir contra equipos que te superan claramente en presupuesto. Pasamos por una época muy complicada en Segunda, pero no hemos parado de mejorar y ahora ha llegado una justa recompensa", agrega Marcelino.
Con todo, afrontan el tramo decisivo del año sabedores de que "a partir de ahora cada partido es una final" porque en la Liga BBVA, en su opinión la mejor del mundo por tener el "nivel competitivo medio más elevado", cualquiera puede "ganar" a cualquiera y "es un error admitir que hay rivales asequibles".
"La felicidad familiar" es su clave para triunfar
"Estamos en una posición ideal para soñar con metas muy por encima de lo exigido a principio de temporada. Hay que seguir el mismo camino sin desviarnos. No debemos mirar más allá del partido inmediato", advierte el asturiano, "muy conforme y contento" por haber renovado hasta 2019. "Hemos encontrado un sitio perfecto para trabajar y desarrollar nuestras ideas", aclara el técnico del 'Submarino', que señala a la "felicidad familiar" como su calve para triunfar.
El de Villaviciosa elude las comparaciones con el Villarreal de Manuel Pellegrini, "un referente" del conjunto castellonense, porque "cada época es diferente". "Los jugadores son los que ganan y transmiten buenas sensaciones a la grada, y los entrenadores ponemos nuestro granito de arena. Pellegrini hizo unas temporadas extraordinarias aquí combinando buen fútbol con grandes resultados. Compararme con él es muy bonito, significa que las cosas marchan bien", celebra.
"Admiro mucho a Simeon, el atleti es un fiel reflejo de él"
En cuanto a otros compañeros de profesión, considera que todavía es pronto para juzgar" a Zinédine Zidane y que Luis Enrique Martínez "es un entrenador muy fiable y sabe lo que hace", aunque al que admira "mucho" es a Diego Pablo Simeone. "El Atlético es un equipo fiel reflejo suyo y que hace en el campo lo que ensaya en los entrenamientos y quiere exactamente el entrenador. Convence a sus futbolistas para hacer un trabajo colectivo impecable en función de una idea muy válida", apunta.
El asturiano sabe que entrenar al Real Madrid o al FC Barcelona "es casi imposible" y que prácticamente lo mismo en el caso del Atlético, aunque este ha tenido un "perfil" de entrenador "más parecido" al suyo "en los últimos años".
"Marcharme a otra liga no es una prioridad. Un cuerpo técnico no puede pensar a largo plazo porque nuestra profesión es muy volátil y cambiante, pero el proyecto del Villarreal está muy vivo", prosigue de cara a entrenar fuera.
A la hora de definirse, lo hace como "dialogante, sincero y exigente" y deja claro que si pueden terminar "una jugada en cinco pases seguidos" no lo harán "en veinte", mientras que se queda, "desde el punto de vista futbolístico y personal", con "Cazorla, Bruno y Villa" como los que mejores jugadores que ha entrenado. Además, no elige entre Cristiano y Messi, ve a Neymar "a día de hoy un pelín por debajo" del portugués y el argentino, y, aparte de estos, ficharía a "Neymar, Lewandowski y Modric".