Mundial femenino de Fútbol
El presidente de la RFEF se disculpa públicamente por el beso a Jenni Hermoso en la celebración del Mundial: "Me he equivocado, fue sin mala fe en un momento de máxima efusividad".
Luis Rubiales, presidente de la RFEF, ha pedido disculpas pública por su polémico beso a Jenni Hermoso tras la victoria de España en la final del Mundial femenino: "Hay un hecho que tengo lamentar y es todo lo que ha ocurrido entre una jugadora y yo. Hay una magnífica relación entre ambos, al igual que con otras. Seguramente me he equivocado, lo tengo que reconocer. En un momento de máxima efusividad, sin ninguna mala intención, sin ninguna mala fe... pues bueno, ocurrió lo que ocurrió, creo que de manera espontánea", ha empezado su mensaje, difundido por la Real Federación Española de Fútbol.
"Aquí no se entendía porque lo veíamos como algo natural, normal. Pero fuera parece que se ha formado un revuelo"
Asegura que ahora ha entendido que la posición del presidente federativo requiere cierto decoro en eventos de este tipo: "Aquí no se entendía porque lo veíamos como algo natural, normal. Pero fuera parece que se ha formado un revuelo. Si hay gente que se ha sentido dañada, tengo que disculparme, no queda otra. Tengo que aprender de esto y entender que cuando es presidente de una institución tan importante como la Federación tiene que tener más cuidado en ceremonias y este tipo de cuestiones".
En un principio, Rubiales tildó de "tontos del culo" que decían "gilipolleces" e "idioteces" a quienes criticaron su beso a la futbolista española. Por eso, también ha querido matizar esas palabras en su mensaje de disculpas: "Hay también unas declaraciones por mi parte en las que dije que esto me parece una idiotez. Era porque aquí dentro nadie le daba las más mínima importancia, pero fuera sí que se la han dado. También quiero disculparme ante esas personas porque tendrán sus motivos".
"Por último, sí que estoy apenado porque ante el mayor éxito de nuestra historia en el fútbol femenino esto haya empañado en cierto modo la celebración. Hay que darles el mérito a estas mujeres y al equipo liderado por Jorge Vilda y esto se tiene que celebrar por todo lo alto", ha querido acabar el presidente de la RFEF, Luis Rubiales.
El caso es que la euforia de Luis Rubiales, presidente de la Real Federación Española de Fútbol, durante la entrega de medallas a las jugadoras no ha pasado desapercibida. Felicitó una a una a las jugadoras de la selección, abrazando y besando en la mejilla a todas ellas. A todas, excepto a Jenni Hermoso: para ella el beso fue en la boca. Un beso muy criticado en redes sociales y por diversas asociaciones feministas e incluso ministros como Miquel Iceta, responsable de la cartera de Cultura y Deporte.
Jenni Hermoso ha reconocido que en un directo de Instagram que no le gustó el beso, si bien también ha defendido a Rubiales confirmando que tienen una gran relación y asegurando que su comportamiento con todas ha sido de diez: "No se puede dar más vueltas a un gesto de amistad y gratitud, hemos ganado un Mundial y no vamos a desviarnos de lo importante".
Tras la entrega de medallas Jenni Hermoso, que falló un penalti en el minuto 70 de la final ante Inglaterra, vio que varios de los usuarios que estaban en directo en Instagram le preguntaron por el beso con Luis Rubiales y no dudó en responder: "Pero tampoco me ha gustado eh".
Mientras tanto, algunas compañeras, que parecían estar viendo el vídeo en directo, se ríen y le preguntan por lo sucedido, a lo que Hermoso contesta: "¿Pero qué hago? Mírame a mí", dice la madrileña. No obstante, la propia Hermoso también le quitó hierro al asunto públicamente: "No se puede dar más vueltas a un gesto de amistad y gratitud, hemos ganado un Mundial".
Lo cierto es que el presidente de la RFEF se mostró eufórico a la hora de saludar a las jugadoras y a todo el cuerpo técnico de la Selección. En el vestuario, aún extasiado, el motrileño anunció a las jugadoras de la Selección que les regalará un viaje pagado a Ibiza. También bromeó asegurando que allí se casará con Jenni Hermoso. La secuencia fue captada en un directo por Salma Paralluelo.