Dani Alves
La magistrada del juzgado de instrucción número 15 de Barcelona, Anna Marín, consideró en el auto de prisión del futbolista, según El Periódico, que "existen indicios mucho más que suficientes" para considerar Dani Alves fue el autor de una violación cometida en la discoteca Sutton de Barcelona.
Sigue conociéndose más detalles en el caso Alves. Después de que Cristóbal Martell, abogado del futbolista brasileño, presentara un recurso contra el auto de prisión de Alves y en el que ponía en tela de juicio la versión de la joven, el diario El Periódico informa de que la jueza que instruye la causa considera que "existen indicios mucho más que suficientes" para considerar que el exfutbolista de Pumas, Barcelona y Sevilla fue el autor de una violación.
El medio catalán explica que la Audiencia de Barcelona tiene ahora un plazo de siete días para dictaminar si existe riesgo de fuga por parte del futbolista y si las pruebas que existen contra Dani Alves son o no suficientemente sólidas.
En concreto, en el auto de prisión firmado Anna Marín, magistrada del juzgado de instrucción número 15 de Barcelona, siempre según El Periódico, la jueza considera que "existen indicios mucho más que suficientes" para considerar que la madrugada del 31 de diciembre se produjo una violación en la discoteca Sutton de Barcelona y que el sospechoso fue autor de la misma.
La defensa de Alves cuestiona la versión de la joven y habla de "distorsión narrativa"
Esta opinión de la jueza contrasta de forma radical con la defensa de Dani Alves, que argumenta en su recurso contra ese auto de prisión que las cámaras de la discoteca "desmienten de forma radical" la versión de la víctima, porque no la muestran bajo un clima de "terror, pavor o dominación", y sostiene que su relato puede ser una "distorsión narrativa".
En el escrito de más de 20 páginas redactado por Cristóbal Martell, el abogado de Dani Alves, el futbolista se ofrece a entregar sus pasaportes brasileño y español, llevar una pulsera telemática, pagar la fianza que sea necesaria y comparecer, incluso diariamente, en el juzgado para que la jueza deje al jugador en libertad hasta que se celebre el juicio por esa supuesta violación.
La defensa también esgrime que Dani Alves tiene residencia junto a su esposa en Esplugues de Llobregat (Barcelona) y que cuenta con un arraigo personal, familiar, social y empresarial en la capital catalana, lo que difumina el posible riesgo de fuga.
En el recurso presentado por Cristóbal Martell para lograr la excarcelación de Dani Alves se sostiene que los vídeos del local muestran que antes del momento de la supuesta violación denunciada por la joven, Alves y la víctima, que acudió a la discoteca con una prima y una amiga, se encontraban departiendo de modo "lúdico y festivo, rodeados de muchísima gente en un espacio abierto", lo que "dista mucho" del escenario de una "intimidación ambiental".
Además, la defensa de Dani Alves sostiene que la grabación desmiente que el futbolista cerrara la puerta del baño en el que sucedió la presunta violación: primero es él quien entra en el recinto y, dos minutos después, lo hace la joven, "sin que Dani Alves le franquee el paso".