HA ASEGURADO QUE EL MUNDIAL DE SUDÁFRICA FUE "EL MÁS LIMPIO DE TODOS"
Blatter lo tiene claro, el fútbol, en su opinión, no está corrupto. Así lo asegura en una entrevista en la 'BBC'. No obstante, el presidente de la FIFA desde 1998 anunció su renuncia cuatro días después de haber sido reelegido, a finales de mayo, tras la detención de siete altos cargos del organismo. "Lo hice porque quería proteger a la FIFA. A mí mismo puedo protegerme; soy lo suficientemente fuerte", sostuvo.
El dirigente ha añadido que no se siente "moralmente responsable" de los actos de altos directivos como el estadounidense Chuck Blazer, que admitió haber recibido sobornos relacionados con el Mundial de Suráfrica 2010. Blazer, que llegó a amasar una fortuna valorada en 22 millones de dólares (18,9 millones de euros), ocultos en sociedades pantalla, acordó colaborar con la justicia estadounidense en 2011 para evitar la cárcel.
Su confesión fue clave para que el Departamento de Justicia de EE.UU. presentase cargos contra nueve directivos de la FIFA y otras cinco personas vinculadas a la organización. A pesar de las dudas alrededor del Mundial de Sudáfrica, Blatter aseguró hoy que aquella Copa del Mundo fue la "más limpia que se ha celebrado nunca".
El presidente del organismo asegura que la FIFA es la "parte que ha sufrido" a raíz de esos escándalos, si bien cree que resurgirá después del "tsunami" de acusaciones que se han vertido contra algunos de sus miembros.