EN LA RADIO OFICIAL DEL CLUB
El presidente del Sevilla FC, José Castro, dejó claro que las relaciones con la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) "no son idílicas" después de haber "acatado", pero no compartido la decisión de jugar la Supercopa de España a "un solo partido" ante el FC Barcelona.
"¿Las relaciones con la RFEF? "Magníficas no son", contestó el máximo mandatario del Sevilla. "Ha habido una pugna por cuestiones de la Supercopa y, en este momento, idílicas no son porque pensamos que se no se nos ha tenido en cuenta para este asunto. Tenemos que aceptar el tema de la final que ellos han decidido, pero no podemos tener las mejores de las relaciones", indicó.
"Jugamos la Supercopa a un partido porque tenemos la obligación de hacerlo, pero insistimos en que no estamos para nada de acuerdo", recordó Castro. "Seguimos manteniendo que queremos jugar los días 5 y 12, y que nos sentimos perjudicados porque no se nos ha tenido en cuenta. A nosotros ni, sobre todo, a nuestra afición, que tenía el partido incluido para verlo en el Sánchez-Pizjuán y no lo va a poder ver", lamentó.
"No podemos tener la irresponsabilidad de meter a la entidad en daños mayores, pero insistimos en que no estamos para nada de acuerdo con la final a un partido, y que se dispute en Tánger. Jugaremos porque nos lo hemos ganado y porque tenemos la posibilidad de obtener un título. Pero no porque estemos de acuerdo. Jugamos a una fecha y allí, cuando se confirme, porque la Federación nos obliga a ello", añadió al respecto.
Castro mantuvo un breve encuentro con Luis Rubiales, presidente de la RFEF, presente en la presentación en Sevilla del libro 'Cien años de Fútbol Andaluz'. Breve encuentro, al que se sumó José María Cruz, director general de la entidad nervionense, los cuales le han recordado el malestar del club tras esta cuestión.
En cuanto a la afición y su desplazamiento a Tánger, sede aún por confirmar por parte de la RFEF, el presidente del Sevilla aseveró que no influirá en la decisión de los seguidores. "No soy quién para decirle a la afición qué tiene que hacer. Es libre de hacer lo que estime oportuno. Repito, son circunstancias excepcionales y nuestro club tiene la obligación deportiva de jugar ese partido, no es cuestión de emonumentos, sino por obligación", espetó.
"Lo acatamos, pero no estamos para nada de acuerdo. Estudiaremos la cuestión, porque era un partido incluido en el abono, para que la afición no se vea perjudicada", finalizó Castro.