Real Madrid
Ignacio Fernández, gerente de una tienda de muebles en A Rúa de Valdeorras (Ourense), iba de camino a IFEMA a una feria de decoración, cuando en una rotonda de Valdebebas frenó para dejar paso a otro coche, recibiendo un golpe por detrás de otro vehículo. El otro conductor era ni más ni menos que Zinedine Zidane, que se dirigía a Ciudad Deportiva del Real Madrid.
"Nada más verlo le reconocí y le dije que me hubiese gustado conocerte en otras circunstancias, pero tampoco está tan mal", explicó Ignacio para la 'Voz de Galicia'.
Para evitar que la situación se alargara y se llenara la escena de periodistas, ambos decidieron arreglar los papeles por teléfono: "Cuando vi que era Zidane me quedé tranquilo, al menos ya sabía que tenía seguro y tenía todo pagado", afirmó entre risas en Cope. "Yo le di mi teléfono pero él no el suyo, como me imaginaba", explicó.
Pero para que la gente creyera a Ignacio, le pidió hacerse un 'selfie'. "Le dije que podíamos tomarnos una 'selfie', porque de lo contrario la gente no creería que me di un golpe con Zidane. Y él muy amablemente dijo que sí. Se quitó el gorro y nos hicimos la foto. También le dije entre bromas que si quería quedaba todo en nada, que cambiábamos allí los coches y listo".
Más tarde recibió la llamada del representante de Zidane para arreglar los papeles: "Me dijo que estaba muy agradecido. Tenía prisa porque iba a entrenar y agradeció no haberle entretenido pidiendo firmas, camisetas o entradas".