LAMENTABLES PALABRAS
Se preparaban para arbitrar como primer trío femenino en la Tercera División catalana. Lamentablemente tuvieron que escuchar insultos sexistas, y eso que portaban una pancarta de una campaña de la Federación para acabar con los insultos desde la grada.
Demostraron su profesionalidad y admiten no haber escuchado insultos. "Cuando te concentras en una cosa, las cosas externas desaparecen, siempre es minoría", afirma Matilde Esteves.
En las gradas, las aficionadas creen que es más fácil insultar a las mujeres. "Hay gente que todavía no entiende que unas arbitras piten un partido".