Eurocopa Femenina
La selección inglesa venció 2-1 a las germanas en la final disputada en Wembley. Toone (62'), Magull (79') y Kelly (109') fueron las goleadoras.
Ahora sí, Inglaterra rompió su malefició europeo. Después de que los chicos no pudieran hacer bueno el ya famoso 'Football is coming home' el año pasado en la Eurocopa masculina, las pupilas de Sarina Wiegman lograron por fin el primer título continental del fútbol británico.
Y lo hicieron en casa, en Wembley, testigo también del trágico desenlace de los 'Three Lions' el pasado verano frente a Italia. Hoy, el combinado femenino, tiró de garra y coraje para vencer 2-1 a Alemania y tocar la gloria.
Una baja imprevista
Las germanas empezaron el decisivo duelo con una pérdida inesperada y fundamental: Alexandra Popp. La delantera teutona llegaba igualada como máxima goleadora del torneo a la inglesa Beth Mead. Su lesión en el calentamiento alteró los planes.
Y las alemanas lo notaron, faltó pólvora. Las atacantes germanas no tuvieron el acierto necesario para abrir el marcador en sus aproximaciones al área. Sí lo tuvo, en el minuto 62, Ella Toone. La delantera inglesa ganó la carrera al espacio y adelantó a las suyas con una vaselina preciosa.
A apenas 10 minutos del fin del tiempo reglamentario, Lina Magull logró al fin ver puerta y mandó a las redes un centro desde la banda derecha. Empate, de nuevo, y todo por decidirse en la prórroga.
Un gol tan feo como importante
Un nuevo tiempo extra para Inglaterra, que ya eliminó a España en cuartos de esta manera, terminó con el mismo resultado que entonces. Una jugada embarullada en un córner acabó con Chloe Kelly metiendo la puntera para hacer estallar a la afición de Wembley.
No fue el tanto más estético, pero poco importa eso. Gol, es gol. Y este fue el más importante de la historia del fútbol femenino inglés. En Wembley, ante su afición, y logrando lo que el combinado masculino nunca ha conseguido. Inglaterra es campeona de Europa.