MUCHOS IRÍAN ÚNICAMENTE EN BUSCA DE PELEA
Un grupo de entre 100 y 150 hooligans belgas del colectivo de ultraderecha "Casuals United Belgium" tiene previsto asistir al partido de mañana en Niza entre Bélgica y Suecia, informó el diario belga 'La Libre'.
Según el diario, estos seguidores radicales no tendrían como objetivo agredir a los aficionados radicales suecos sino a los franceses e ingleses, después de los incidentes violentos en Marsella y Lens. La mayoría de estos individuos tiene prohibida la entrada a estadios belgas, según 'La Libre'.
En busca de bronca
De hecho, no todos los hooligans belgas tienen previsto asistir al partido, sino que muchos preferirán pasear por la ciudad "en busca de posibles adversarios", aseguró por su parte el diario 'Dernière Heure'.
"Casuals United Belgium" es una organización compuesta por ultras de clubes del país, como el Anderlecht, el Brujas o el Standard de Lieja, que dado el buen momento del combinado nacional decidieron unir fuerzas y ser "los hooligans nacionales", explica este rotativo.
Pese a ir en el mismo bando en los partidos de la selección, estos radicales no dudan en organizar peleas entre ellos cuando defienden los colores de sus clubes, según "La Libre". El colectivo se creó a raíz de los atentados de Bruselas del 22 de marzo y fue responsable de los altercados en la plaza de la Bolsa durante el homenaje a las víctimas del 27 de marzo.
Unos 9.000 belgas para el partido
Más de cien radicales de este grupo de extrema derecha interrumpieron la concentración de cientos de belgas que rechazaban el terrorismo, y llegaron caminando con cánticos, bengalas, a paso rápido y con saludos nazis. Los miembros de "Casuals United Belgium" tuvieron que ser dispersados ese día por la Policía mediante la acción de agentes antidisturbios e incluso cañones de agua.
Se espera que alrededor de 9.000 seguidores belgas asistan al partido en Niza entre Bélgica y Suecia. En esta ciudad ya tuvo lugar un altercado entre jóvenes franceses y norirlandeses el pasado 12 de junio, cuando un grupo de entre 20 y 30 locales lanzaron botellas contra los seguidores de Irlanda del Norte, que respondieron de la misma forma, causando en total siete heridos.