LIGA JORNADA 8 | DEPORTIVO ALAVÉS 0-2 REAL SOCIEDAD
La Real Sociedad resolvió el derbi vasco ante el Deportivo Alavés con dos goles en cinco minutos, firmados por Mikel Oyarzabal y Aritz Elustondo, en el tramo final del choque, que puso fin a la mala racha visitante.
Los de Eusebio llevaron el peso y la posesión de un choque en el que ambos contendientes tuvieron oportunidades para adelantarse en el marcador, hasta que la escuadra guipuzcoana lo logró en el minuto 76 con una genialidad de Oyarzabal y sentenció en el 80 con un disparo con fortuna de Elustondo. Con esta victoria los donostiarras recuperan el pulso tras cuatro jornadas consecutivas sin conocer la victoria, mientras que los alaveses frenan su crecimiento tras la victoria ante el Levante la jornada pasada.
El plantel local dio el primer aviso en la primera jugada tras un saque de esquina que cabeceó Guillermo Maripán muy cerca de la escuadra de la meta de Gero Rulli. Posteriormente, fue la Real la que se hizo con el mando del partido e llevó el peso del mismo con jugadas largas elaboradas que sin embargo, no llegaron a finalizar al toparse con un Alavés bien plantado.
En el minuto 10, una internada de Alfonso Pedraza por la banda izquierda la culminó Manu García, pero el capitán no consiguió dirigir el remate. A los donostiarras les costó mucho superar la barrera defensiva del equipo albiazul, que buscó con velocidad el contraataque y la conducción de balón de sus hombres más habilidosos.
El visitante Juanmi tuvo ocasión de adelantar a su equipo en el minuto 24 con un disparo desde fuera del área que obligó a estirarse a Fernando Pacheco para enviar el balón a córner. El Alavés no tardó en responder con una cabalgada de Alfonso Pedraza en el 28 por la izquierda, que tras recortar dentro del área cedió a Munir que llegaba de cara a portería, pero el delantero envió el balón por encima de la puerta guipuzcoana.
El envite continuó por los mismos derroteros y la Real Sociedad probó varias alternativas para atacar la portería albiazul, pero la zaga local no permitió que los donostiarras creasen peligro con centros al área y con desmarques de sus delanteros.
El derbi se fue al descanso con empate a cero tras un último intento realista por adelantarse en el electrónico a través de un disparo lejano de Mikel Oyarzabal que atajó sin problemas el portero babazorro. En la reanudación, la escuadra de Eusebio tuvo la primera ocasión con una jugada a balón parado que lanzó Willian José, pero que atrapó Pacheco sin complicaciones. Manu García respondió en el minuto 53 con disparo desde fuera del área tras un giro que se marchó lentamente a la izquierda de Rulli.
El partido tuvo más ritmo y ambas escuadras buscaron finalizar las jugadas, como lo hizo de nuevo el delantero realista con otro lanzamiento lejano que se envenenó tras golpear en un defensa, pero no impidió que el portero local detuviera el balón. Seguidamente, en el 55, fue Pedraza el que probó fortuna y su disparo raso, con la izquierda, roza la cepa del poste izquierdo del portero realista. Fueron unos instantes de toma y daca, de los que ninguno de los dos equipos consiguieron sacar réditos en forma de gol.
En el ecuador de la segunda mitad, De Biasi optó por cambiar el sistema táctico y dio entrada a Carlos Vigaray y Aleksandar Katai para colocar una línea defensiva con cinco hombres. El nuevo dibujo dio buen resultado a los vitorianos que se mantuvieron firmes, pero la Real fue embotellando poco a poco al Glorioso en su área y recibió el premio en forma de gol con un disparo de Mikel Oyarzabal en el minuto 76 que buscó el palo largo de Pacheco, quién no pudo alcanzar la pelota con su estirada por bajo.
Sin tiempo para reaccionar, tras un saque de esquina, Aritz Elustondo amplió la cuenta en el 80, tras recoger un rechace en el área e introducir el balón en la red después de que éste golpeara en Rubén Duarte. Con este resultado, la Real cerró el choque y no dio opción a los locales a meterse de nuevo en el partido.