OCURRIÓ EN ARGENTINA
Con un chándal del Barça y una gorra. Así vestía Lautaro Guzmán, un joven enfermero, cuando iba en el tren en Buenos Aires tras trabajar en el turno de noche en la Clínica Avellaneda.
En un momento, una mujer le llamó "villero" y no quiso que el joven enfermero se sentase junto a su hija por su aspecto físico.
"Se sube una señora en Adrogué con una nena y la nena se quiso sentar al lado mío. La señora le agarró la mano y escuché por lo bajo: ¿Cómo te vas a sentar con ese villero?", explicó Guzmán en 'deBrown'.
En Argentina un "villero" hace referencia a una persona que vive en las villas o barrios más pobres. Pero nada más lejos de lo normal: el joven era enfermero y criticó la actitud de la señora en sus redes sociales.
"La gente va por la vida juzgando por las apariencias, acá el 'villero' con el que no me siento en el tren. Señora ojalá nunca necesite de mí, porque para su fortuna, la voy a ayudar traiga la ropa que traiga", escribió Guzmán compartiendo la imagen con el chándal del Barcelona.