IDA DIECISEISAVOS FINAL EUROPA LEAGUE | ATHLETIC 3-2 APOEL
La enésima remontada en San Mamés, la séptima de la temporada, esta vez por 3-2, puso al Athletic Club en ventaja en la eliminatoria de dieciseisavos de final de la Liga Europa ante un APOEL de Nicosia que salió vivo de La Catedral gracias a un gol de Nicholas Giannotas en el minuto 89 que apagó el incendio que el conjunto vasco había provocado en el área visitante durante todo el encuentro.
Fue un auténtico partidazo el de los de Ernesto Valverde, que pusieron cerco a la meta de Boy Waterman desde el primero al último minuto del partido y fueron capaces de sobreponerse al primer tanto de George Efrem con tres tantos de Mikel Balenziaga, Aritz Aduriz e Iñaki Williams, este sin duda el jugador del partido.
Pero el gol de Giannotas en los últimos estertores del choque deja en el aire una eliminatoria que se decidirá dentro de una semana en el GPS Stadium de la capital chipriota. Con Iturraspe en el once en lugar de San José, el Athletic aguantó bien la presión con la que arrancó el APOEL y ya para el minuto 5 tuvo su primera ocasión.
Dominio rojiblanco pero los chipriotas abrieron la lata
Un triple disparo de De Marcos, Williams y Yeray a un córner botado por Beñat que dieron dos veces en Yamberé y una en Nuno Morais. Ya dueño del partido, el Athletic siguió poniendo en apuros a Waterman, que tuvo que multiplicarse para parar en dos tiempos una vaselina de Raúl García desde el borde del área que dio en Merkis.
La segunda de esas intervenciones ya sentado sobre el césped. Un remate de cabeza que se le fue alto a Muniain en el pico del área pequeña, a uno de los numerosos centros de Williams desde la derecha, cerró unos primeros 20 minutos de claro color rojiblanco.
El APOEL pidió penalti en una acción de Yeray sobre Sotiriou dentro del área local, pero apenas si era un respiro amarillo entre tanto apuro junto a su portero. Ante el que Merkis cortó un claro pase de gol de Williams sobre Aduriz y Raúl García no encontró ningún compañero en una dejada de cabeza en el punto de penalti, en otro centro de Williams, un auténtico martirio para Ioannou.
Parecía que el gol del Athletic iba a llegar, pero no. El que abrió el marcador fue el conjunto chipriota al aprovechar Efrem un balón de Vinicius a la espalda de un De Marcos mal perfilado. El delantero chipriota enganchó, además, un remate con efecto para superar la presencia de Iraizoz.
Fue un mazazo para los de Valverde, quienes, no obstante, reaccionaron pronto y encontraron el empate rápidamente en un disparo de Balenziaga que dio en Milanov, Merkis y el larguero antes de superar la raya de gol ante la desesperación de Waterman.
El Athletic no bajó los brazos y fueron a por el partido
Una jugada de fortuna, en la que el gol tanto se le pudo dar a Balenziaga como a Merkis en propia puerta. En todo caso una acción que hizo justicia a los merecimientos de los bilbaínos, que aún tuvieron en el descuento una nueva oportunidad en otra colada de Williams con un pase de gol cortado por la defensa.
Siguieron insistiendo los leones a vuelta de vestuarios, con seis córneres seguidos y un par de ocasiones de las que no sacó fruto. Estas últimas un cabezazo de San José que detuvo Watermnan y un volea de Aduriz al lateral de la red.
Cuando parecía que el APOEL había capeado el temporal, cuando un error de Yamberé en la salida del balón permitió a Muniain buscar en profundidad a Aduriz para que el ariete fortaleciese su liderato en la clasificación de goleadores cruzando el balón imposible para Waterman.
No cejó el Athletic, desatado hasta el punto de que Christiansen dio entrada a un central, el navarro Iñaki Astiz, por el ariete Sotiriou para colocarse en defensa con tres centrales. Eso fue ya con el 3-1, un tercer gol que premió la gran noche de un incontenible Iñaki Williams.
La 'pantera' bilbaína peinó cruzado, también inalcanzable para el meta visitante, un centro medido de Raúl García. Seguía sin conformarse el equipo de Valverde, que lamió el cuarto gol tres veces. En un centro de gol de Williams a Aduriz que le volvió a cortar la defensa, un cabezazo alto de San José a centro de Beñat y en un testarazo en plancha de Muniain, en su tercera ocasión del partido, que salió lamiendo el palo.
No llegó el cuarto, si no el segundo del APOEL. Una pared de Giannotas con un compañero que le dejó solo ante Iraizoz, al que batió de tiro cruzado. Un duro varapalo para el Athletic, que sacó poco fruto en el marcador a un partidazo con 15 córneres lanzados y también una quincena de ocasiones de gol creadas.