COPA AMÉRICA | ESTADOS UNIDOS 2-1 ECUADOR
Clint Dempsey, autor de un gol y asistente en el otro, tumbó hoy a la selección de Ecuador (2-1) y colocó a Estados Unidos en las semifinales de la Copa América, en las que se cruzará en Houston con el ganador del Argentina-Venezuela.
Veintiún años más tarde y en su cuarta participación en el torneo continental, los estadounidenses sufrieron en la segunda parte ante un Ecuador que pudo empatar en los minutos finales.
Dempsey marcó en el 21 y asistió en el 65 a Gyasi Zardes y recortó por Ecuador en el 73 Michael Arroyo. Los dos equipos disputaron casi toda la segunda parte con uno hombre menos, pues fueron expulsados en la misma jugada Jermaine Jones y Antonio Valencia.
American Outlaws ("Americanos fuera de la Ley") es la hinchada organizada que sigue a Estados Unidos en cada partido en la Copa América Centenario. En Seattle, ocuparon el fondo sur y empujaron a suyos en un primer tiempo equilibrado entre dos selecciones semejantes.
Ecuador propuso poca elaboración y choque físico. Con Jefferson Montero por un costado y Antonio Valencia por otro, buscaron romper la compacta línea defensiva de Estados Unidos. Pocas veces lo lograron en el primer periodo.
El delantero Michael Arroyo, sustituto de Miller Bolaños, tuvo dos buenas ocasiones. Una se fue por encima en el comienzo del encuentro y otra, al final del primer tiempo, midió mal el remate cuando encaraba solo al meta local. Estados Unidos, impulsados por el aliento de los bulliciosos American Outlaws, golpeó en el 21.
El extremo Bobby Wood, el chico de Hawai que jugará en el Hamburgo alemán, controló un pase largo, aguantó y la cedió atrás. Jermaine Jones, el pulmón de la selección de Jürgen Klinsmann, centró tenso para la cabeza de Dempsey.
La estrella estadounidense giró el cuello lo suficiente para celebrarlo en el estadio de su club, el Seattle Sounders. Los locales, que procuraron más el juego largo que el corto por el estrecho marcaje al que fue sometido el cerebro de Estados Unidos, Michael Bradley, se acercaron al segundo antes del intervalo.
En una contra, Dempsey vio a Alejandro Bedoya, quien, a pocos metros de la portería y sin marcaje, remató mansamente a las manos del meta Alexander Domínguez. Wood, el mejor de los estadounidenses en el primer periodo, reprendió el egoísmo de Bedoya. El mayor empuje ecuatoriano al comienzo de los segundos 45 minutos se enturbió por dos acciones disciplinarias.
Antonio Valencia, jugador del Manchester United, propinó una patada sin balón a Bedoya. Y su compañero Jermaine Jones respondió con un toque en la barquilla al ecuatoriano Arroyo. El colombiano Wildar Roldán mandó a la calle al Valencia, por doble amarilla, y a Jones lo echó con roja directa por agresión.
Poco después, en un contraataque, Dempsey acomodó un disparo dentro del área que Gyasi Zardes remachó en la línea de gol. Era el minuto 65. Ecuador no bajó los brazos y, en saque de falta lateral pegado al córner, la estrategia dio sus frutos.
Walter Ayoví la puso en la corona del área y Arroyo enganchó un trallazo raso. Quedaban 15 minutos para los 90 y los sudamericanos apretaron. Enner Valencia la tuvo en dos claros cabezazos que no encontraron portería.
Estados Unidos se parapetó con varios cambios defensivos -retiró a Dempsey y puso al medio de contención Kyle Beckerman- e intentó perder tiempo sacando faltas. Los últimos minutos fueron broncos. El seleccionador de Ecuador, Gustavo Quinteros, fue expulsado y el defensor Brooks casi marca un gol en propia meta y da el empate a Ecuador.