Escándalo Rubiales
Siete días después del histórico triunfo de España en el campeonato del mundo de fútbol femenino, la gesta sigue viéndose empañada por la polémica protagoniza por el presidente de la Real Federación Española de Fútbol.
La final del campeonato del mundo de fútbol femenino acaba de finalizar y las jugadoras comienzan a recoger sus medallas. La reina Letizia y la infanta Sofía felicitan a las futbolistas. Es el turno para Jennifer Hermoso. Tras saludar a las representantes de la Casa Real, es el turno del presidente de la federación. Ante la sorpresa de todos los presentes y de los espectadores que siguen a través de la televisión el acto, Luis Rubiales agarra la cara de Hermoso y le da un beso en la boca sin su consentimiento.
Minutos después, la jugadora afirma en el vestuario a sus compañeras que el suceso no le ha gustado. Antes de regresar a España, Miquel Iceta, ministro de Cultura afirma que "no es aceptable besar en los labios a una jugadora para felicitarla". En una entrevista radiofónica y antes las primeras críticas recibidas, Luis Rubiales dice de manera contundente que "no debemos hacer caso de los idiotas y estúpidos" y que "si hay tontos, que sigan con sus tonterías".
Medios nacionales y extranjeros están pendientes del desarrollo del caso, y deportistas, políticos y la sociedad entera no deja de sorprenderse ante el cariz que toman los acontecimientos. En la escala técnica que realiza en Doha el vuelo que trae a España al equipo, los asesores de Luis Rubiales le convencen para que grabe un vídeo en el que pida perdón, y así lo hace: "Seguramente me he equivocado, lo tengo que reconocer. Entre nosotros no le hemos dado importancia, pero fuera sí".
La polémica crece y a Rubiales no le queda más remedio que pedir perdón
Pedro Sánchez se pronuncia al ser preguntado por los periodistas y deja claro que "las disculpas ofrecidas por Luis Rubiales no son suficientes ni adecuadas".
El sindicato que defiende a Jennifer Hermoso condena la conducta de Rubiales y la Federación Española de Fútbol acusa a la jugadora a través de un comunicado de mentir. Con una polémica que crece día a día, se llega a la asamblea general extraordinaria del viernes donde Luis Rubiales anuncia que no va a dimitir ante la sorpresa de todos.
Ante una situación compleja, el Consejo Superior de Deportes eleva al Tribunal Administrativo del Deporte dos denuncias contra Rubiales. Una por abuso de poder y otra contra el decoro deportivo. Mientras tanto, la FIFA, decide suspender a Luis Rubiales durante 90 días y con efecto inmediato de sus cargos en el fútbol nacional e internacional y le prohíbe tener cualquier tipo de relación tanto con Jennifer Hermoso como con su entorno más cercano.