Copa del Rey
El Betis de Manuel Pellegrini se impone en los penaltis por 5-4 a un Valencia que fue inferior en el global de la final. Tercera Copa del Rey del Betis. Increíble ambiente durante toda la final en La Cartuja.
El Betis se proclamado campeón de la Copa del Rey 2022 tras imponerse al Valencia por 5-4 en la tanda de penaltis. Gran final en La Cartuja con dos aficiones increíbles que han dado una lección en una noche histórica para el fútbol español.
Los béticos salieron como un disparo en la final y enseguida se hizo con el control del balón, del partido y de las ocasiones. No necesitó muchas para abrir el marcador, un gran centro de Bellerín terminó con un remate de cabeza imponente de Borja Iglesias para desatar la locura de los 20.000 béticos en La Cartuja.
Una final igualada en la que perdonó el Betis
No hizo acto de aparición en la final el Valencia hasta pasados unos minutos, muy a remolque y sin encontrar huecos en la zaga de Pellegrini, los primeros 30 minutos tenían sello y dueño propio. Sin embargo, el Betis no ha alardeado de la mejor defensa esta temporada y la única ocasión clara la aprovechó el Valencia, los chés salieron a la contra con 3-4 pases y Hugo Duro finalizó ante Bravo con una picadita a lo Raúl que empató al final y despertó a los soldados de Bordalás.
El fútbol es un estado de ánimo y el gol es el gran reflejo de ello, empataron los valencianos y de repente comenzaron a ganar los duelos divididos, el Betis dio un paso atrás y la final se igualó. En un minuto de locura el Valencia desperdició un 2 contra 1 y en la jugada de después Canales disparó al palo. No había tiempo para más, la final, igualada, se fue al descanso en empate.
Se mantuvo la paridad en gran parte de la segunda mitad, parecía que el nivel físico del Betis bajaba y el Valencia se iba haciendo hueco en el encuentro pero a falta de 20 minutos se abrió completamente la final, Borja Iglesias hizo diabluras en el área y los de Pellegrini rozaron el gol en varias ocasiones, con disparos peligrosos de Juanmi y Canales.
Musah, el único que falló en la tanda
El equipo de Sevilla metió en el área a su rival pero el palo, el desacierto de los delanteros y Mamardashvili impidieron un segundo gol. Perdonó y mucho el equipo de Pellegrini en los últimos minutos. La final se fue a la prórroga, demasiado premio para un Valencia que terminó pidiendo la hora.
La prórroga fue un mero trámite, apenas hubo ocasiones, demasiado miedo a perder entre ambos equipos, el desgaste físico se apoderó de los 22 cuerpos y los penaltis decidirían la final. La calidad se trasladó a los 11 metros, donde solo un jugador falló, Musah, del Valencia, será el hombre que peor dormirá esta noche. El Betis reina en España y conquista su 3º Copa más de 15 años después.