LIGA BBVA JORNADA 23 | ATLÉTICO 3-1 EIBAR
Parecían entonarse cánticos de tragedia en el Calderón tras la primera parte. Parecían cobrar más fuerza cuando Keko hizo el 0-1 y dejaba muy tocado a un Atlético incapaz. A un Atlético que no podía con el ordenado Eibar sobre el verde del Manzanares. Pero lo que mal empieza no tiene por qué terminar mal, y al final del encuentro el feudo rojiblanco fue una fiesta que celebró el 3-1, una importante victoria y que también se desató tras el gol número 100 de Fernando Torres con el escudo del oso y el madroño.
Se hizo esperar. Mucho. Demasiado. Intento tras intento, partido tras partido, el fuenlabreño parecía no poder pasar del gol 99, parecía tener una barrera infranqueable que le hacía fallar una y otra vez ocasiones de esas que suelen acabar con el cuero en las mallas. Pero, por fin, y con su futuro más en el aire que nunca, se quitó las cadenas y la presión para terminar celebrando la centena de dianas rojiblancas en un encuentro en el que dio la razón a Simeone.
En el que hizo buena la frase del Cholo de "minutos de calidad", pues Fernando no fue titular ante el Eibar. Fernando estaba en el banquillo. Fernando vio desde la banda cómo Keko, un ex del Atlético, hacía el 0-1 nada más empezar la segunda mitad después de un error garrafal de Saúl. Y Fernando vio también desde ahí cómo Óliver y Vietto entraban antes que él para dar la vuelta a un encuentro que podría haber supuesto el adiós casi total al título de Liga.
Remontada de cabeza
Pero no. Y no fue fácil, pues los armeros plantearon una incómoda primera parte y los rojiblancos se vieron en la necesidad de remontar en la segunda. Lo hicieron recuperando tres virtudes: la primera, las jugadas a balón parado, pues así llegaron los dos primeros tantos. La segunda, el poderío con la testa gracias a las dianas de Giménez en el 1-1 y de Saúl en el 2-1. Y la tercera, a Fernando Torres.
Pues El Niño, habiendo visto todo lo que vio desde el banquillo, se incorporó al juego en los mejores minutos de su equipo. Con Óliver llevando el timón del juego, tocando, combinando y levantando al respetable de su asiento, el más joven de los Torres que tiene el Atlético tuvo en sus botas el control total del encuentro cuando salió. Mientras, el mayor de los Torres entró al césped con un hambre voraz. Intenso, rápido y contando con claras ocasiones que no acababan por perforar la red de Riesgo.
Sin embargo, el esfuerzo, pronto o tarde, tiene su recompensa. Y la de Fernando llegó cuando el encuentro llegaba a su fin. Un centro medido de Vietto lo aprovechó a la perfección el de Fuenlabrada, con un inteligente movimiento para deshacerse del defensa y para, con un único toque de su bota, desatarse celebrando el que es su gol 100 con el Atlético ante el éxtasis del graderío.
Tarde de festejos en el Calderón
Así pues tarde perfecta para el Atleti, que consigue tres puntos para seguir dando batalla al Barça y al Real Madrid, o 'molestando' al Barça y al Real Madrid como les gusta decir a los rojiblancos. Y además suman para la causa su efectividad a balón parado y a un Fernando Torres que si coge racha puede ser clave en el devenir de la Liga BBVA. El 9 quiere un título, y bien podría ser este el que le lleve a Neptuno.