Deporte femenino
La madrileña forma parte de la historia del fútbol femenino español por ser una de las ‘trans’ pioneras en este deporte.
Antena 3 Deportes vuelve a pisar el césped junto a Alba Palacios para saber cómo ha sido su trayectoria desde que en 2018 debutase como una de las primeras transexuales en federarse en España.
Como ella misma nos cuenta, el fútbol es su pasión innata: “Empecé a jugar cuando tenía 2 años, mis padres se cansaron de mí y me dieron un balón”. Y también su refugio: “Cuando empiezo a notar que me siento diferente y no entiendo por qué necesito una válvula de escape, el fútbol fue la mía” ya que no fue fácil y no siempre tuvo el apoyo de su familia: “Estuve un año sin hablar con mi madre” algo que superó gracias a la ayuda psicológica: “Cuando vas a un psicólogo te ayuda a comprender que no todo va a ser bonito, que la gente necesita tiempo para entenderlo, han perdido un hijo y han ganado una hija. No es fácil”.
Finalmente, en 2017 decidió dar el paso y empezar el proceso de transición en un hospital de la capital. Además, la futbolista asegura que la hormonación tiene efectos secundarios brutales que cualquier mujer no tiene y que gracias a este proceso su testosterona ha bajado de 600, cuando entrenaba como Álvaro en el CF Pozuelo, a 15 actualmente, lo cual, ha sido esencial para su inicio en el fútbol femenino: “No empecé a jugar hasta que mi hormonación no estuviese en valores femeninos”.
No es una ventaja
Respecto a la ventaja, tanto ella como su entrenador, Iliass Haddad , reivindican que es un tópico que proviene del desconocimiento de la gente: “La gente se piensa que por ser ‘trans’ tienes ventaja, ni mucho menos”, “Bajo ningún concepto ventaja, al revés, Alba es una jugadora muy disciplinada”.
Por otra parte recalca la importancia de darle visibilidad a su historia: “Salí en los medios porque no tenía ningún referente de pequeña”. Y sobre todo, normalizar este tipo de situaciones ya que a día de hoy sigue habiendo episodios complicados: “Siempre va a haber gente que tenga miedo y ese miedo se refleja con un insulto o apartándose de ti”.
A pesar de todo, su entusiasmo y sus ganas de seguir haciendo lo que más le gusta superan cualquier obstáculo: “Me encantaría retirarme dentro de mucho tiempo porque siento que he perdido tiempo por no haber salido antes”.