Fútbol
Hace sólo unas semanas, varios encapuchados quemaban la estatua de Zlatan Ibrahimovic por 'traidor', tras la compra por parte del sueco del Hammarby, club de Estocolmo y rival del Malmö.
Lo cierto es que la adiquisición del club de Estocolmo por parte del delantero sueco no ha sentado nada bien en su ciudad natal, que paga su rabia con la estatua del futbolista.
La enorme figura de Zlatan, de más de tres metros de altura y media tonelada de peso, aparecía con una soga al cuello, símbolo del ahorcamiento, y con intentos visibles de amputación en sus extremidades. Varios ultras le habían intentado cortar las piernas con una sierra.