Galicia
Pablo Nemo caminó, con solo una mochila de 12 kg, los 15.000 kilómetros que separan Ciudad del Cabo y El Cairo.
El ataque de un hipopótamo furioso, un arresto por parte de policías corruptos, dormir a la intemperie rodeado de leones, acabar ingresado en el hospital con casi 42ºC de fiebre tras ingerir un vaso de leche recién ordeñada… Estos son algunos de los muchos peligros a los que ha hecho frente el primer español en recorrer África a pie.
Pablo González, más conocido como Pablo Nemo, es un bailarín coruñés que en 2021 emprendió la aventura de su vida. Ataviado con una pequeña tienda de campaña, filtros para el agua y un par de mudas de ropa (lo poco que cabía en su mochila de 12 kilos), decidió recorrer el continente africano desde el sur hasta el norte solo con la ayuda de sus propias piernas.
Su travesía comenzó en Ciudad del Cabo (Sudáfrica) y finalizó, 800 días después, en enero de 2024, en El Cairo (Egipto). Por el camino visitó otros 9 países más: Lesoto, Zimbabue, Botswana, Zambia, Malwi, Tanzania, Kenia, Etiopía y Arabia Saudí.
Anduvo un total de 15.000 kilómetros en apenas 2 años y 50 días, un trayecto que le ha cambiado la vida: "La persona que se fue a África no es la misma que la que volvió a España", asegura.
Aventurero desde que nació, Pablo empezó su travesía con el único propósito de reconectar consigo mismo después de la soledad de la pandemia. Lo suyo fue un viaje "romántico", tal y como lo define, "como todos los que hacen aquellas personas que aman el planeta y la naturaleza".
Este periplo lo ayudó, en sus propias palabras, a "meditar, estar más conectado con el mundo y a vivir más en el presente". Así mismo, le enseñó a quitarse todos los prejuicios que tenía sobre el continente africano. Una tierra que define como "maravillosa y poco peligrosa" y unas personas a las que considera "muy hospitalarias y bondadosas".
Esta no es la única aventura que ha emprendido este joven coruñés. Pablo abandonó su ciudad natal con tan solo 17 años y desde aquel entonces no ha parado.
Su profesión como bailarín (que ahora ha dejado relegada en favor de su faceta de trotamundos) lo ha llevado a vivir en ciudades como Madrid, Londres, Nueva York y Los Ángeles mientras que su pasión por la naturaleza le ha hecho volar a países como Islandia y Marruecos.
Aún así, no hay nada como regresar a casa por mucho tiempo que pase: "Volver a Galicia y volver a Coruña siempre es bonito, me encanta pisar los lugares que me han visto crecer".
Síguenos en nuestro canal de WhatsApp y no te pierdas la última hora y toda la actualidad de antena3noticias.com