Sóftbol
Fátima Ofkir Reyes, una joven de L’Hospitalet y promesa del sóftbol, fue detenida hace tres años en Omán portando siete kilos de morfina. Un grave delito en ese país y por la que esta joven ha sido condenada a 25 años de prisión.
"Dejo de venir a los entrenamientos y se apartó mucho de sus amigas. Lo veíamos extraño", explica María Llarí, compañera de Fátima.
La joven pasará mucho tiempo en una cárcel de mujeres de Mascate, en Omán. Sus amigas esperan que no sea así, pero su situación es muy complicada.
"La esperanza es lo último que se pierde. Yo espero que salga antes porque no se lo merece", desea Laura de la Cruz, amiga de Fátima.
Apenas saben nada de Fátima desde que ingresó en prisión.
"Ni un minuto, a lo mejor hablaba 20 segundos y te decía: 'Dentro de lo que cabe, estoy bien'", asegura Laura sobre el tiempo que pueden hablar con ella en cada llamada.
Una ONG visitó a Fátima en prisión, antes de que se conociera la grave sentencia.
"Fátima es una niña, no deja de ser una niña y está muy temerosa y alicaída. Lo está pasando francamente mal y ahora con la sentencia peor", explica Javier Casado, presidente de Fundación +34.
La única esperanza para Fátima es que España firme un protocolo con Omán para que pueda cumplir la pena en una cárcel de nuestro país.