Rugby
La figura de Siya Kolisi, capitán de la selección sudafricana de rugby, es ya historia de Sudáfrica. Otra vez, el rugby une a blancos y negros y a toda una nación.
El rugby lo ha vuelto hacer y de nuevo se ha convertido en un elemento conciliador en Sudáfrica, como en aquel Mundial del 95, donde Nelson Mandela supo a través de este deporte establecer un puente entre blancos y negros.
Y el cine lo recogió inspirándose en un libro: "Si Mandela estuviera vivo lo celebraría, estaría feliz", nos dice John Carlin, periodista y autor de 'El factor humano'.
Kolisi, heredero de Mandela
Hoy ese espíritu de Nelson Mandela lo encabez Siya Kolisi, el primer capitán negro de la selección sudafricana.
Su vida es una historia de superación, un niño negro criado en un hogar muy humilde. Sus padres eran adolescentes y le cuidó su abuela que murió cuando él tenía 10 años.
Kolisi se ha convertido en todo un símbolo; se casó además con una mujer blanca y eso rompió esquemas.
El rugby dejó de ser en Sudáfrica un deporte para blancos por hombres como ;olisi y por imágenes como esta que da la vuelta al mundo: el jugador Eben Etzebeth, acusado de racismo, besa la frente de un negro.
Además del valor deportivo, este deporte tiene un gran significado social, como ocurrió tras ganar aquel Mundial del 1995.