Rescate
La tripulación del rompehielos ruso Alexánder Sánnikov ha obrado un milagro: encontrar a dos pescadores perdidos en mitad de una placa de hielo a la deriva en el mar de Kara, en el norte de Siberia.
Fue como encontrar una aguja en un pajar, ya que la superficie de búsqueda era del tamaño de Suecia. Y es que su moto de hielo se hundió en el hielo.
Los dos pescadores saltaron a tiempo de salvar la vida y luego enviaron una señal de socorro a la que acudió el enorme rompehielos, el único barco capaz de navegar por el hielo helado del Ártico.
"Al acercarnos a la zona el mayor reto era ir a una velocidad mínima porque el barco podía hundir la placa de hielo en la que se encontraban y hundirlos", relata el capitán del rompehielos, Yegor Agapov.
Los dos pescadores pasaron un día en mitad de la inmensidad helada, pensando que iban a morir allí.
Tras ser rescatado por el rompehielos, los dos pescadores recibieron asistencia médica y comida caliente, antes de ser evacuados a la tierra firme en un helicóptero.