Rescate
Un senderista ha sido rescatado cuando estaba a punto de morir en Nuevo México. Gracias a los gritos de auxilio desesperados, una familia le escuchó y pudieron ayudarle.
El excursionista llevaba perdido dos semanas, herido y sin comer, rozando los límites de la propia resistencia humana.
"Escuché a alguien diciendo: ¡Espera, espera!. Estaba muy demacrado, necesitaba ayuda urgente. No podía mantenerse en pie, estaba delirando, no era consciente", reconoce uno de los senderistas que participó en su rescate.
El protagonista de la historia, que salvó la vida de milagro y estaba desorientado cuando le encontraron sus 'ángeles de la guarda', aseguró haber sido atacado por otros senderistas.
En esta ocasión, la situación se saldó con un final feliz, pero otros montañeros no han tenido la misma suerte. Un hombre perdió la vida recientemente al precipitarse 150 metros al vacío tras sufrir una caída en Huesca.