Coronavirus
El coronavirus no entiende tanto de edades como creemos, y esto es lo que viene a decir el gran héroe de esta historia. Él es Óscar Riballo, boxeador de 32 años, y sabe lo que es ver peligrar su vida por el virus.
Óscar se contagió en septiembre y tras ingresar en el hospital su estado no mejoraba, así que los médicos decidieron llevarle primero a la UCI para después inducirle a un coma en el que permaneció durante 7 largos días.
El boxeador cuenta que preguntó cuánto tiempo podía permanecer en coma y los médicos le dijeron que podían ser 4 días o 4 meses. Afortunadamente, Riballo se defendió igual de bien que lo hace en el ring y se está recuperando del coronavirus.
"Aún no como ni bebo, todo con sonda", reconoce el boxeador, que demuestra una gran fuerza de voluntad y ya piensa en su regreso al cuadrilátero.
Óscar, desde su experiencia como paciente de coronavirus en la UCI, pide responsabilidad a aquellos que creen que por ser jóvenes no pueden pasarlo mal en esta pandemia.