Natación sincronizada
La historia de Camino Álvarez es una demostración de que con perseverancia y sin rendirse se pueden hacer realidad los sueños.
Camino tiene síndrome de Down pero eso no le ha impedido pelear por su afición y lograr ser la primera nadadora de sincronizada federada en España con este trastorno genético.
Camino siempre es la primera en llegar a los entrenamientos, la más sacrificada y responsable. Ella entrena antes de que llegue el resto del equipo y es que su entrega y dedicación son infinitas desde hace tres años.
"Un día veo que está imitando a las niñas y al acabar le dije a una de sus primas, que entrena con nosotros, que por qué no le decía que viniera a probar. Y al día siguiente como un reloj", explica Leticia Ortega, entrenadora de Natación Artística del CD Pingüinos de Arrecife.
"Me gusta el agua desde recién nacida. En el agua me siento relajada", explica Camino.
Además, practicar natación sincronizada ayuda a Camino con su psicomotricidad, resistencia, respiración...
Se ha propuesto ir de manera individual a los juegos olímpicos de Turquía para personas con síndrome de Down. Ese es su siguiente objetivo.