Caballos
Cuando termina su vida deportiva muchos de ellos sirven de terapia para personas enfermas. "Cuando se retiran no les gusta estar 20 años dando vueltas por el campo", dice una especialista.
Cuando la vida deportiva de un caballo de carreras se acaba puede comenzar aún más fructífera, ayudar en la terapia de personas enfermas, con problemas psicológicos, físicos, mentales...
"Es un trabajo para el 99% de ellos", explica Sue Molloy, especialista en carreras de caballos. Son caballos a los que la jubilación les llega demasiado pronto, en Gran Bretaña, cada año, 7.000 pura sangres dejan de competir, aunque es algo que ni deciden ni quieren.
"A los caballos de carreras cuando termina su vida deportiva con solo 3 o 4 años de edad no les gusta simplemente estar dando vueltas por el campo durante los siguientes 20 o 30 años", dice Molloy. ¿Y qué tienen estos caballos para ser tan versátiles?
La Universidad de Bristol estudia su comportamiento
La Universidad de Bristol está inmersa en una investigación sobre su comportamiento tras retirarse de las carreras, les hacen distintas pruebas desde el máximo respeto a un animal que los entrenadores definen así.
"No es el león del que nunca te puedes fiar ni es un perro que te ama incondicionalmente, es algo entre medio lo que es este espíritu salvaje. Un espíritu al que unen un sexto sentido: "Creo que tienen un sexto sentido el que tienen, algo que conecta al caballo con el humano", concluye Sue. Una relación, ahora también terapéutica, que comenzó hace 5.000 años.