Baloncesto
Yekaterina Lísina y Michele Graglia comparten una historia muy personal que los une al mundo del modelaje y el deporte.
Yekaterina Lísina posee una peculiaridad única que ha condicionado por completo su carrera. Actualmente posee el título de ser la mujer con las piernas más largas del mundo, como así lo reconoce el libro Guiness de los récords. Esta condición le ha permitido desarrollar una carrera como jugadora de baloncesto y modelo.
Casi 133 centímetros llega a medir su pierna izquierda. Es lógico, por tanto, que la modelo muestre con orgullo esta condición personal en las redes sociales, donde comparte en muchas ocasiones vídeos en los que muestra sus largas y tonificadas piernas.
A pesar de dedicarse ahora a las pasarelas y ser una figura ilustre en Rusia, reconocida por su llamativo físico, la modelo se dedicaba antes a jugar al baloncesto. Y lo cierto es que también desarrolló con gran habilidad esta profesión, ya que llegó a lograr un bronce olímpico en los juegos de Pekín de 2008.
Con una altura de 2,06 metros y una talla 47 de pie, Lísina no pasa desapercibida por la calle. Incluso su altura le dificulta pasar por las puertas.
Sin embargo, la exdeportista también confesó que esta particularidad de su físico le generó ciertos problemas en su infancia, ya que llegó a sufrir bullying cuando esta era pequeña.
Michele Graglia, sin embargo, sufre el caso contrario. Este era un modelo muy demandado por los mejores fotógrafos del mundo. A pesar de su éxito como modelo, este decidió que tal profesión no era lo que realmente le apasionaba y que, por ello, debía dedicarse a su verdadera pasión: 'el running'.
"Lo transformé en una profesión y estoy muy agradecido de poder decir hoy que es mi vida", confiesa el exmodelo, que se siente muy unido al cometido que ahora ocupa su tiempo.