Euroliga
El jugador blanco y los entrenadores de uno y otro equipo se pronunciaron sobre la vergonzosa pelea entre los jugadores de Real Madrid y Partizan en la recta final del último cuarto. Hubo 21 descalificaciones.
Es la pelea del año y seguramente de las últimas décadas en el baloncesto europeo. Se recuerdan tanganas, enfrentamientos, piques e incluso alguna pelea pero lo que sucedió este jueves noche en el Wizink Center supera con creces todo esto. 21 descalificados, puñetazos, llaves de yudo e incluso un lesionado (Dante Exum salió en muletas) en lo que ya es una de las secuencias más vergonzosas del deporte.
Horas después de la batalla campal los ánimos se calmaron y las aguas volvieron a su cauce. Momento para que algunos de los protagonistas salieran a dar explicaciones. En el Real Madrid las dieron Rudy Fernández, veterano y leyenda del baloncesto europeo y Chus Mateo, entrenador. En el Partizan también quiso pronunciarse Zelko Obradovic.
"Hay que pedir perdón a nuestros aficionados y al baloncesto en general"
El escolta de los blancos, Rudy Fernández, no quiso poner excusas y fue claro y conciso ante la prensa: "Hay que pedir perdón a nuestros aficionados y al baloncesto en general. No se tienen que ver estas situaciones pero con muchas pulsaciones se cometen errores y esto es lo que ha pasado", detalló el jugador de 38 años.
"Somos dos clubes amigos. La tensión del partido se debe quedar en lo de hoy y que sigamos jugando al baloncesto y que esto no vuelva a pasar. Es difícil tener campo a favor y que el Partizan haya jugado mejor que nosotros. Punter, Llull, da igual quién empezara, la prioridad es el baloncesto y no el espectáculo del último minuto. Agradecemos las palabras de Zelko Obradovic", sentenció Fernández, que hizo referencia a las declaraciones del entrenador rival, un mito de la Euroliga que volvió a dar una lección dentro y fuera de la cancha.
"Voy a intentar calmar a toda la gente en Belgrado"
Obradovic, 9 veces campeón de Europa como entrenador, quiso poner cabeza tras el partido: "No sé qué puedo decir. Está en manos de árbitros y Euroliga. Creo que lo que ha ocurrido no es bueno para el basket, ni para la imagen de Real Madrid ni del Partizan. No puede pasar esto nunca más. Desde este momento voy a intentar calmar a toda la gente en Belgrado. Quiero que se hable de baloncesto, no quiero que se hable de esto. Tengo amigos aquí y gran respeto para todo el mundo. Cuando lleguemos a Belgrado, voy a intentar calmar a toda la gente que reciba al Real Madrid. Que no vayan a hacer nada. Cada día voy a repetir esto. Necesitamos hablar de baloncesto. Cuando se habla de baloncesto no hay nada mejor", sentenció el serbio.
"La frustración nos ha hecho perder los nervios"
El entrenador del Real Madrid, Chus Mateo, también pasó por rueda de prensa y valoró lo sucedido en la recta final del último cuarto: "El equipo contrario ha sido muy incisivo y la frustración nos ha hecho perder los nervios. Esto es un deporte y no nos gusta ver lo que ha pasado. Con esa frustración y calentura es difícil estar calmado", empezó diciendo el que fuera segundo de Pablo Laso.
"Hay que bajar un poco las pulsaciones, los jugadores han hablado aquí en el vestuario y todos se han calmado. Espero que esto no llegue a más. Todos pedimos disculpas. También el Partizan. Hay que ponerse en la piel de los jugadores y saber a que pulsaciones están. Me preocupan no solo por las sanciones. Estamos intentando recomponernos del calendario, y muchos jugadores que están entrando y saliendo. Ojalá que no haya sanciones y no perdamos alguna pieza más. Vamos a seguir peleando hasta el final y ojalá podamos volver a Madrid a un quinto partido. Es difícil pero no imposible", concluyó Mateo tras la segunda derrota de su equipo en los Playoffs.
Los blancos visitarán Belgrado con un 0-2 y con toda la presión del mundo: si no ganan el tercero se van fuera. Cero margen de error, el Madrid necesita 3 victorias seguidas para meterse en la Final Four.