EUROLIGA | ANADOLU EFES 72-68 FC BARCELONA LASSA
El FC Barcelona tropezó (72-68) ante el Anadolu Efes en la undécima jornada de la Euroliga, en un choque dominado siempre por el cuadro turco en el Abdi Ipekci Arena hasta que a menos de un minuto del final el equipo catalán se puso por delante en el partido por primera vez, espejismo del que fue despertado con dureza.
Un Barça dormido en ataque y defensa
Pese a la victoria balsámica ante el Panathinaikos de Xavi Pascual, los de Giorgios Bartzokas protagonizaron un pobre encuentro más para colección de esta temporada. Flojo en defensa y poco fluido en ataque, encomendado a un Tyrese Rice al que se le obliga a hacer todo bien.
El sustento culé terminó con 22 puntos y fue el artífice de esa única ventaja azulgrana en el encuentro, con un triple a 46 segundos del final (66-68). Rice sin embargo concedió después la opción de dos más uno a Dunston, un opción que se convirtió en jugada de cuatro puntos al no cerrar el Barcelona el rebote del segundo tiro.
Entre Dunston y un Granger rubricando su gran partido echaron el lazo los turcos a su tercera victoria seguida. El Barça encajó en cambio la cuarta derrota de los últimos cinco partidos, antes de dos salidas más de nivel como son CSKA de Moscú y Baskonia.
Con un bagaje negativo (5-6), fuera de los ochos primeros de la clasificación, el conjunto catalán volvió a las andadas, a un juego con altibajos en el que afloran las dudas. Pese al momento delicado, los de Bartzokas se permitieron un inicio tranquilo, muy lento y sin intensidad en defensa (12-3).
Rice no pudo contra el Anadolu Efes
Los coletazos de Rice fueron sumando poco a poco para un Barça sometido en la primera mitad por Granger, Osman, Brown y Dunston. Tras el descanso fue Thomas Heurtel el que se cebó con el conjunto catalán, estrenando su anotación hasta cerrar con 12 puntos el tercer parcial.
Un 9-0 ponía la máxima de 16 puntos para los locales (48-32), maquillada antes del último parcial con los arreones de Rice y los primeros tres puntos casi sobre la bocina de Koponen. El Barça se puso las pilas en defensa con el finlandés y con Renfroe, y despertó el miedo a perder un partido que era suyo en los de Velimir Perasovic.
Pese al daño que hacía Granger, los de Bartzokas encontraron el acierto suficiente para lograr esa primera ventaja, pero el duro desenlace sacó los colores de un Barcelona que no encadena dos alegrías.