Asalto Capitolio EEUU
La voz de los profesionales de la NBA volvió a escucharse con fuerza a través de todos los campos, ahora para condenar de manera unánime los disturbios y el asalto al Capitolio de Estados Unidos en Washington, ocurrido este miércoles. Del mismo modo que entrenadores y jugadores de la NBA condenaron y denunciaron la injusticia racial y la actuación policial mientras estuvieron en la burbuja de Orlando, esta vez lo hicieron a través de todo el país, donde se disputaron 11 partidos.
La primera voz que se escuchó fue la del entrenador de los Sixers de Filadelfia, Doc Rivers, que en su día fue invitado a hablar en un mitin de Joe Biden después de que el presidente electo usara sus palabras en un discurso de octubre, llamando a la unidad racial en Gettysburg, Pensilvania.
Rivers volvió a denunciar a la multitud desenfrenada del miércoles en Washington, aunque advirtió que "prevalecerá la democracia". "Lo diré porque no creo que mucha gente quiera: ¿Te imaginas hoy si todos fueran negros, asaltando el Capitolio y lo que ha sucedido?", preguntó Rivers.
"Para mí, es una imagen que vale más que mil palabras para que la veamos todos. Es algo que debemos tener en cuenta, una vez más, sin perros policía que atacan a la gente, ni garrotes golpeando a la gente. Gente escoltada pacíficamente fuera del Capitolio. Demuestra que puedes dispersar a una multitud pacíficamente, supongo", argumentó Rivers.
En las manifestaciones frente al Capitolio de EEUU se ha podido ver a David Wood, un exjugador de la NBA y del Barcelona, campeón de liga en 1990. "He borrado la mayoría de mis publicaciones hoy. Fui a la manifestación del Capitolio y del Presidente Trump para rezar. Muchas personas me enviaron mensajes para mantenerlos informados, así que viví en streaming porque pensaba que la gente quería ver lo que estaba pasando", ha asegurado en su cuenta de twitter.
"La gente está enojada porque sus votos no contarán porque los votos ilegales no se echan y no los culpo por eso", concluye Woods.
El base estrella de los Golden State Warriors, Stephen Curry, a través de sus redes sociales le recordó al presidente Donald Trump lo que había dicho sobre cómo actuar contra los manifestantes del movimiento 'Black Lives Matter'.
Trump criticó a los manifestantes por ser "violentos" y pidió que los participantes fueran arrestados, lo que dio pie a Curry para mandarle un mensaje al presidente republicano, preguntándole si iba a decir lo mismo sobre los disturbios que protagonizaron sus partidarios en el Capitolio.
Incitados por Trump
Trump incitó a sus seguidores en un mitin, diciéndoles que nunca aceptaran la derrota, poco antes de que se produjeran los disturbios. Los partidarios de Trump marcharon hacia el Capitolio de Estados Unidos mientras el Congreso verificaba los resultados del colegio electoral que convirtiesen a Biden en el 46 presidente del país.
La turba empujó a la policía e irrumpió en el Capitolio, lo que obligó a los legisladores a salir a un lugar seguro y suspender temporalmente la sesión.
Más crítico y directo fue el entrenador de los Warriors, Steve Kerr, quien antes del partido que su equipo disputó esta noche frente a Los Ángeles Clippers, en San Francisco, dijo que el único responsable de lo sucedido era el presidente Trump.
"Las mentiras del robo de las elecciones que salieron de su boca influyeron directamente e incitaron al asalto al edificio del Capitolio", denunció Kerr. "Lo sucedido es un recordatorio de que la verdad importa y no se debe permitir seguir engañando a la gente con mentiras permanentes durante cuatro años y más desde el poder".
Kerr es un destacado activista, apasionado por establecer leyes que prohíban la posesión de armas de fuego, y la lucha en pro de la justicia social.
Es miembro del grupo de la NBA que el verano pasado formó el comité de Entrenadores para la Justicia Racial. Entre otros miembros del comité dirigido por el entrenador Lloyd Pierce (Atlanta), Gregg Popovich (San Antonio) y Rivers (Philadelphia).
De rodillas con el himno
Antes de comenzar el partido, los jugadores de Warriors y Clippers se arrodillaron mientras sonó el himno nacional y llevaron puestas las camisetas "Black Live Matter".
También en Miami, los jugadores de los Heat y los Celtics de Boston se arrodillaron durante la interpretación del himno nacional y antes habían discutido la posibilidad de no jugar el encuentro en protesta por la decisión del fiscal de Kenosha, en Wisconsin, de no poder cargos contra el agente de policía que disparó por la espalda a Jacobs Blake, un hombre negro, cuando iban a arrestarlo.