Baloncesto
Se agotan los adjetivos para describir la inmejorable racha de Luca Doncic. Y es que el talento del jugador esloveno parece no tener fondo. La pasada madrugada volvió a lograr un triple doble, y ya es el décimo. Sin embargo, esta vez la exhibición del jugador de los Dallas Mavericks no sirvió para que su equipo obtuviera la victoria.
Terry Rozier fue el encargado de poner freno a los Dallas Mavericks. Con sus 29 puntos, el base de los Hornets logró impulsar a su equipo hasta la victoria, que finalizó con un marcador de 120-123.
Durante el encuentro, Doncic dejó una serie de acciones que sirvieron para el deleite de su afición y de los apasionados de este deporte. En primer lugar, el ex-jugador del Real Madrid regaló esta impresionante asistencia para su compañero Justin Jackson que acabó machacando el aro a placer.
Después, Doncic protagonizó una vez más la anécdota del partido cuando, después de anotar un gran triple, lo celebró con uno de los jugadores rivales que permanecían sentados en el banquillo. El jugador con el que chocó la mano no era otro que Willy Hernangómez, que sonrió al ver la reacción de Doncic.