PREMUNDIAL 2019
No importa que la nueva selección de Estados Unidos se encuentre formada por jugadores del Tercer All-Team de la NBA, su potencial ganador volvió a estar presente en el partido amistoso que esta noche disputaron frente a la de España y en el que se impusieron por 90-81. La nueva victoria de Estados Unidos, sin las grandes Estrellas de la NBA, frente a España deja la serie entre ambos equipos con ventaja de 25-4 favorable al de las Barras y las Estrellas.
El escolta Donovan Mitchell con 13 puntos y cuatro rebotes, encabezó el ataque balanceado de Estados Unidos que tuvo a cuatro jugadores con números de dos dígitos, incluido el ala-pívot Khris Middleton, quien aportó 12 tantos, tres rebotes y tres asistencias. Mientras que el base Kemba Walker, el nuevo jugador de los Celtics de Boston, y líder de la selección, fue el más completo al conseguir 11 puntos, ocho asistencias y seis rebotes.
España tuvo al veterano pívot Marc Gasol de líder indiscutible, que aportó 19 puntos, cuatro rebotes y tres asistencias. El base Ricky Rubio también realizó una gran labor individual y de equipo al conseguir 16 puntos, repartió siete asistencias, recuperó cinco balones y capturó tres rebotes. Otro base, Sergio Llull con 11 puntos, seis asistencias y dos recuperaciones de balón, fue el tercer jugador español que consiguió superar la barrera de los 10 tantos.
El partido de preparación para el próximo Mundial FIBA de China 2019 comenzó favorable a España con Gasol, único jugador en la pista con un título de la NBA en su poder, que tuvo el honor de anotar la primera canasta del duelo. España siguió arriba con el cierto de Rubio para el parcial de 5-8, pero ahí se acabaron las concesiones de Estados Unidos que comenzó a funcionar con su juego de transición y canastas fáciles desde dentro y fuera del perímetro para tener la primera ventaja (10-8) tras un triple de Mitchell.
Gasol, dentro de la pintura, puso el empate a 10-10 y ese fue el último marcador parcial favorable a España porque Estados Unidos colocó la directa con buenas transiciones y triples, que le permitieron acabar el primer cuarto con una ventaja de 11 puntos (31-20), que sería definitiva. El segundo, tuvo la misma tónica y aunque tanto el seleccionador de Estados Unidos, Gregg Popovich, como el de España, Sergio Scariolo, comenzaron a darle protagonismo a la segunda unidad, el resultado fue el mismo, siempre favorable al equipo local.
España intentó resistir en buen ritmo con el que comenzó el partido, pero las buenas transiciones ofensivas y sobre todo el gran acierto desde fuera del perímetro de los hombres dirigidos por Popovich permitió al equipo de las Barras y las Estrellas irse al descanso con una ventaja cómoda de 13 puntos (54-41).
Middleton con 10 puntos, dos rebotes y dos asistencias era el líder del ataque balanceado del equipo de Estados Unidos, que se le veía cómodo sobre la pista del Honda Center, de Anaheim, y sin ningún tipo de presión. Rubio se convertía en el mejor jugador español de la primera parte al concluir con 14 puntos y eso le hizo ser de nuevo el motor en el inicio del tercer periodo en el que España intentó meterse de nuevo en el partido al colocarse con parcial de 58-50. Pero de inmediato, primero el escolta Jaylen Brown, de los Celtics, y luego el ala-pívot Kyle Kuzma, de Los Angeles Lakers, con sendas canastas cada uno de dos puntos, pusieron tranquilidad en el marcador para el parcial de 62-50 y todo volvió a la normalidad.
Aunque luego el jugador del Real Madrid y exNBA, Rudy Fernández, anotó dos triples espectaculares, al final del tercer periodo la ventaja de Estados Unidos se mantenía 13 tantos arriba (71-58). Cierto que España con grande defensa y buscando soluciones en el ataque le pudo hacer algo de daño a Estados Unidos, incluido el triple que anotó Llull, pero los hombres de Scariolo eran inferiores individualmente y en equipo.
La historia se repitió al inicio del cuarto periodo cuando España con Quino Colom anotó para el 71-60, pero de inmediato Middleton, Walker y Mitchell, con un triple, dieron a Estados Unidos la mayor ventaja hasta entonces del partido, 18 puntos (78-60), que dejaría ya sentenciado el duelo. Aunque España no se dio nunca por vencida, cada vez que intentaba acortar la desventaja, siempre llegaba la canasta de respuesta por parte de Estados Unidos como el triple de Jayson Tatum, quien acabó con 11 puntos, cinco rebotes y cuatro asistencias, que ponía el parcial de 88-75 y apenas tres minutos del final.
Gasol, en el último minuto, se atrevía con dos triples para el parcial de 90-81 y recordando a las jugadores de la NBA que tiene un título de campeón, pero todo eran acciones individuales de cara a la galería, que llegaban demasiado tarde, sin que ya tuviesen valor real, porque el triunfo ya estaba asegurado por parte de Estados Unidos.