Aventura
El pasado 25 de octubre fue el último día en el que los turistas pudieron escalar hasta la cima del monte Uluru, ubicada a 348 metros de altura en mitad de Australia.
Este monte, sagrado para los aborígenes australianos, es una de las grandes atracciones para todo aquel que visita Australia. En mitad del desierto, en el parque nacional Uluru-Kata Tjuta, el monte Uluru fue escalado por casi 400.000 personas el pasado año.
Pero eso es ya historia. Desde el pasado 25 de octubre, la cima del Uluru será un lugar libre de turistas y curiosos. El Gobierno australiano ha atendido la petición del pueblo indígena Pitjantjatjara Anangu, que en 1985 recuperó la propiedad tradicional de las tierras donde habitan desde hace 30.000 años.
El Uluru, o Ayers Rock, como se le denominó durante la colonización británica, ha sido literalmente invadido por tierra y aire durante décadas. Pero eso ha cambiado. A partir de ahora, todo aquel que acuda a este lugar mágico deberá recorrerlo por su base. Ya nadie podrá escalar su cima.